El consejero delegado de Banc Sabadell asegura que el crédito seguirá "contenido" durante "unos años"

¿Escasez o sequía de crédito? Esta es la pregunta que ha planteado la segunda mesa de debate de la jornada que organiza EL PAÍS bajo el título de Catalunya després de la crisi. El director adjunto de EL PAÍS, Xavier Vidal-Folch, ha abierto el debate y ha recordado que el flujo crediticio es esencial para la supervivencia de las empresas. "En la economía real hay algunos avances, pero en las dos últimas semanas ha habido un parón porque los bancos tienen dificultades para financiarse", explica, y ha recordado que este año hay que refinanciar 600.000 millones de euros públicos y privados en España. "Y todo pasa con una gran velocidad", ha agregado Vidal-Folch. A todo ello, ha proseguido, se ha puesto al descubierto los movimientos especulativos bajistas de inversores internacionales y los rumores que se han publicado en algunos medios internacionales. Frente a esta situación, Vidal-Folch ha señalado que la banca española ha destacado por su "rigor". El directivo de EL PAÍS se ha preguntado si cuando esta borrasca escampe el flujo crediticio volverá a la normalidad.

El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, ha puesto los datos sobre la mesa. En el primer trimestre de 2007, un 14% tenía problemas para acceder a la financiación. A finales de 2009, la proporción era del 35%, con una punta del 41%. En el caso de las constructoras, el 65% de las sociedades estaba contra las cuerdas. "En el primer trimestre de este año parece que la situación mejoró. Cabe ver si es porque bajó la demanda de crédito, porque las empresas no lo pidieron o si hubo mejores condiciones", ha dicho Valls.

El consejero delegado de Banc Sabadell, Jaume Guardiola, ha dado un baño de realismo al debate. "La respuesta es no, durante unos años el crédito estará contenido", ha afirmado con rotundidad. Guardiola ha recordado que España es un "país muy endeudado", puesto que la deuda supone el 256% del PIB (el 56% corresponde al sector público; el 86%, a las familias, y el 115%, a las empresas), sólo por detrás de Estados Unidos, Japón y Reino Unido. Sólo el 60% de la deuda, además, está financiada por el ahorro interior. El consejero delegado de Banc Sabadell opina que este apalancamiento arrastra a España a una "recuperación lenta" de la concesión de créditos.

Guardiola no ha querido dejar de enmarcar la crisis financiera española en el contexto europeo: "Ni una sola emisión corporativa ni bancaria en el continente", ha afirmado. Guardiola opina que "esto pasará", aunque las primas de riesgo serán "sensiblemente superiores" a las actuales. Por último, el consejero delegado del Sabadell ha recordado que España ahora está inmersa en una fase de reestructuración bancaria que está suponiendo que se ralenticen operaciones porque las entidades centran su atención en los procesos de fusión.

El secretario de Economía de la Generalitat y presidente del Instituto Catalán de Finanzas (ICF), Andreu Morillas, ha explicado que si bien las concesiones son menores, también lo son las peticiones. Morillas ha afirmado que sí hay indicadores positivos en la economía: se recupera la producción industrial, las ventas de servicios y al detalle, las exportaciones y el consumo energético industrial. Sin embargo, la capacidad productiva está al 70%, diez puntos menos de la que habría en un momento de normalidad. "No debería consolidarse esa situación de restricción crediticia en el continente. Y para eso hace falta más Europa: en coordinación de las políticas fiscales, en política del Banco Central Europeo y en reducción del déficit", ha afirmado Morillas. A su juicio, la receta es: austeridad a corto plazo, sostenibilidad en las cuentas públicas y "reformar" el Estado del bienestar para poder preservarlo, un marco "razonable" de inversión pública y cómo ingerir el peso de la construcción que sobra dentro de la economía.