Disminuye el número de turistas que visitaron España en agosto

Durante el pasado mes de agosto llegaron a España un total de 7.228.028 turistas, lo que supone un descenso del 0,8% respecto al mismo mes del ejercicio anterior. La cifra acumulada mejora ligeramente, ya que el número total de llegadas asciende a 37,3 millones, un 1,3% más que en el periodo enero-agosto de 2003.

Según se recoge en la Encuesta de Movimientos Turísticos en Fronteras (Frontur), cuyos datos han sido difundidos hoy por el secretario de Estado de Turismo y Comercio, Pedro Mejía, la principal vía de acceso de los turistas (aquellos que pernoctan al menos una noche) internacionales para llegar a nuestro país fue la aérea, debido al fuerte aumento que está experimentando la llegada de turistas a través de compañías de bajo coste, hecho que se ha venido repitiendo durante todo el año. En cuanto a los destinos, la primera elección de los extranjeros fue Cataluña, con 1,9 millones de viajeros (el 26% del total nacional), lo que supone un alza del 3,6%; mientras que Baleares registró 1,7 millones de turistas (-1,7%), Andalucía contabilizó 936.000 viajeros (-1,6%) y Canarias experimentó una caída del 6%, hasta los 876.000 turistas.

El Reino Unido copó el 28,2% de las llegadas internacionales en agosto, si bien el número de turistas descendió un 3,9% hasta los 2 millones. Esta caída se concentra en los dos archipiélagos: Baleares, con una reducción del 15,9% y Canarias con un descenso del 6%. El segundo mercado emisor más importante en agosto fue Francia, de donde procedieron el 18,2% de las llegadas, con 1,3 millones de turistas (-9,9%). Este retroceso afectó al litoral mediterráneo, especialmente a Cataluña, Valencia y Andalucía. Además, Alemania contabilizó el 17,3% de las llegadas, con 1,2 millones de turistas (-0,4%), si bien este descenso no afectó al mercado balear, explica Turismo, ya que por cuarto mes consecutivo las islas registraron un crecimiento del 0,4% en el número de visitantes que recibe de este país.

El modelo actual, agotado

Gran parte del sector turístico español apuesta por la diversificación para crecer. Para muchos, el modelo de sol y playa tiene los días contados como consecuencia del deterioro de la competitividad de España frente a otros destinos emergentes, que ofrecen calidad a bajo precio. El Gobierno tiene previsto trabajar este año y el próximo con el objetivo potenciar el turismo cultural y familiar.

Uno de los factores clave para conseguir este tipo de turismo, según explicó recientemente el secretario general de Turismo, Ramon Martínez Fraile, es subsanar la "divergencia" entre la promoción realizada por el sector público y el privado ya que "mientras el público ha realizado una promoción de la calidad media-alta, el sector privado en muchas ocasiones ha estado comercializando a la baja basándose en la lucha por el precio".