Alitalia intenta recuperar hoy la normalidad tras cancelar 1.300 vuelos

La compañía Alitalia canceló ayer 102 vuelos de los 680 previstos y, aunque poco a poco vuelve a la normalidad, hasta mañana lunes no estará totalmente operativa, informaron fuentes de la línea aérea. La huelga del jueves y los paros parciales del viernes y ayer provocaron la cancelación de cerca de 1.300 vuelos, que afectaron a unos 160.000 pasajeros y ocasionaron pérdidas de entre 30 y 40 millones de euros, según Alitalia. Los trabajadores protestan por el plan de saneamiento elaborado por la dirección, que contemplaba el despido de 950 de sus 22.000 trabajadores y la cesión de otros 2.500 a empresas asociadas.

Entre los cancelados ayer se encuentran 40 vuelos que tenían que partir del aeropuerto romano de Fiumicino y otros 40 del milanés de Malpensa. Todos los vuelos internacionales partieron con regularidad, con la excepción del que tenía como destino el aeropuerto estadounidense de Newark.

Alitalia precisó que hasta mañana lunes no se habrá vuelto a la normalidad y que por ello aconseja a los viajeros que se informen en la compañía sobre los vuelos antes de dirigirse a los aeropuertos. Alitalia comenzó el viernes la reanudación parcial de sus vuelos desde el aeropuerto de Fiumicino tras un paro de más de 36 horas de sus trabajadores. Después de la jornada de huelga del jueves, gran parte de los empleados de la aerolínea secundaron el viernes un nuevo paro ilegal en Fiumicino, sin el apoyo de los sindicatos, lo que llevó a la Prefectura (Gobierno Civil) de Roma a asumir el control de los trabajadores de forma excepcional.

El primer ministro, Silvio Berlusconi, considera que la compañía aérea, que atraviesa la peor crisis financiera de su historia, no es más que "una víctima de la liberalización salvaje del mercado" aéreo propiciada por la Unión Europea. "Las autoridades comunitarias, que deberían garantizar la competencia, han propiciado una liberalización del sector sin ninguna precaución", denuncia Berlusconi en una entrevista con el diario Il Reformista. A su juicio, la UE permite a las aerolíneas de bajo coste "practicar una competencia despiadada", que pone en peligro el futuro de las compañías tradicionales.

Por su parte, la aerolínea británica de bajo coste EasyJet se vio ayer obligada a cancelar al menos nueve vuelos, así como a retrasar una media de dos horas la salida de otros 40, debido a un "error administrativo" que ha provocado que los aviones no tuvieran a bordo la documentación acreditativa de disponer de seguro, informó la compañía, que precisa que sí cuentan con él.