Montoro negociará con las comunidades el déficit si Bruselas flexibiliza los plazos

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha confirmado que negociará con los gobiernos autonómicos "una nueva senda de déficit" en cuanto Eurostat confirme las cifras del Estado del año pasado y la Comisión Europea flexibilice el déficit para el país, como ha anunciado el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn. Así lo ha explicado Montoro en el Congreso durante la sesión de control al Gobierno a preguntas del socialista Francesc Vallès.

El diputado le ha preguntado al ministro por esta posibilidad de relajar el objetivo de déficit para las autonomías este año, fijado en el 0,7%, después de acusar a Montoro de ejercer "un control inquisitorial" sobre las comunidades pero no haber controlado las cuentas del Estado. "Se permite el lujo de hacer trampas al solitario. ¿Con qué legitimidad puede mantener esta presión asfixiante sobre las comunidades? Usted no cumple, pero pretende hacer cumplir", ha criticado el diputado.

Ha censurado también que la actitud de Montoro le ha dado la excusa perfecta a la Generalitat "para que se atreva a insinuar una posible prórroga presupuestaria". El responsable de Hacienda ha iniciado su respuesta al diputado menospreciando "la categoría intelectual" de la pregunta.

"Si el déficit está falseado, ¿qué vamos a flexibilizar?", ha dicho el ministro, que ha confirmado a continuación que en cuanto Bruselas confirme el déficit que deberá cumplir España, Hacienda negociará con las autonomías, tal y como había avanzado EL PAÍS hace unas semanas. Montoro ha censurado también que el PSOE ponga "en cuestión" el cumplimiento del déficit por las autonomías, que lo han reducido a la mitad de un año a otro hasta dejarlo en el 1,7% de media en 2012 (el objetivo era el 1,5%). "¿No le parecer enormemente positivo para el Estado de las autonomías, para demostrar que España es un país fiable y gobernable? ¿Eso está criticando?", ha inquirido el ministro.

El objetivo de déficit amenazaba con desatar la primera gran crisis del Gobierno catalán por las diferencias entre los socios de Gobierno para cerrar los Presupuestos de 2013. En este sentido, ERC rechazaba avalar unas cuentas que incluyan el déficit del 0,7% impuesto por el Gobierno central. Las fricciones llevaron al consejero de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, a abrir por primera vez la puerta a prorrogar las cuentas del año pasado de forma indefinida, aunque este miércoles el propio presidente catalán, Artur Mas, lo ha rechazado a la espera de lo que decidan Bruselas y Montoro. Eso sí, ha advertido de que si se mantiene el tope del 0,7%, se tendrán que cerrar "la mayoría de escuelas".