Monti baja los impuestos a las rentas más bajas por sorpresa y limita el alza del IVA

El Gobierno italiano liderado por el tecnócrata Mario Monti ha anunciado este miércoles una rebaja de impuestos por sorpresa para los ciudadanos con ingresos anuales inferiores a 28.000 euros. También, ha decidido dejar la subida del IVA prevista a la mitad, con lo que el tipo de este impuesto aumentará un punto porcentual en lugar de dos. Pese a ello, asegura que conseguirá el equilibrio presupuestario en 2013 como exige Bruselas. Con este movimiento, Monti, que ha aprovechado la traslación de España al epicentro de la crisis para autorelegarse a un discreto segundo plano, toma una dirección alternativa a la que ha escogido el Ejecutivo de Mariano Rajoy para dejar atrás las turbulencias.

Tras una maratoniana reunión de ocho horas del Consejo de Ministros, Monti compareció ante los medios ya de madrugada para presentar los acuerdos alcanzados, que combinan la rebaja de impuestos para las rentas más bajas con recortes del gasto por importe de 3.500 millones. En este apartado sí coincide con Rajoy en tanto en cuanto ha decidido rebajar los servicios sanitarios, en concreto hay menos dinero para la adquisición de dispositivos médicos y contratas, y ajustes en los sueldos a los funcionarios. Para este colectivo se congela la oferta de empleo público y se reduce en un 50 % la retribución por días de permiso que los funcionarios hayan tenido que pedir para cuidar de un pariente, salvo hijos o cónyuges.

Tampoco hay divergencias entre ambos países en el impacto que están teniendo los recortes, que tal y como acaba de advertir el FMI están teniendo un impacto más negativo de lo que se esperaba. La economía italiana acumula cuatro trimestres consecutivos a la baja y cayó un 0,7% en el segundo trimestre y el Gobierno de Monti prevé que cierre el año con una caída del 1,2%. Para 2013, año al que se refieren las cuentas recién aprobadas, el Fondo augura un retroceso del PIB de un 0,7%. La economía de España, por su parte, cayó un 0,4% en el segundo trimestre, acabará el año con un retroceso del 1,7% y, según el organismo presidido por Christine Lagarde, la tercera economía europea caerá otro 1,3% en 2013.

Los Presupuestos de 2013 contemplan la reducción de un punto porcentual del gravamen de los dos tramos más bajos de renta. Así, el tipo del impuesto para aquellos ciudadanos con ingresos inferiores a 15.000 euros pasará a ser del 22%, frente al 23% actual, mientras el de las rentas anuales de entre 15.001 y 28.000 euros bajará al 26%, frente al actual 27%. Por su parte, el gravamen de los tres tramos superiores de ingresos se mantendrán sin cambios.

Junto a este recorte de impuestos, el Gobierno ha aprobado destinar una partida de dinero para cubrir la situación de los italianos que quedaron en un limbo (sin trabajo y sin pensión ) con el aumento de la edad de jubilación.

Por otro lado, el acuerdo del Ejecutivo italiano contempla una subida de un punto porcentual del IVA a partir de junio de 2013, la mitad de lo previsto inicialmente, con lo que la tasa pasará al 11% en el tipo reducido y al 22% en el general.

"Hoy podemos comprobar que la disciplina presupuestaria da resultados", proclamó Monti ante los medios. "Podemos permitirnos un moderado alivio", añadió al anunciar esta rebaja de impuestos, que abre un paréntesis en la severa austeridad impuesta por su Gobierno desde que llegará al poder sin pasar por las urnas en noviembre de 2010 y que ha profundizado la recesión de la economía transalpina. "Esperemos que los italianos vean en esta decisiones no una modificación de la ruta que hemos tomado, sino que esta ruta tiene un sentido", agregó.

Italia, que pese a caer a un segundo plano no es inmune al avance de la crisis y está muy pendiente de lo que pueda pasar con España y su rescate preventivo, celebrará elecciones parlamentarias en unos seis meses y, si por un lado aumentan quienes abogan por que repita en el cargo, y cada vez son más poderosos, la izquierda exige que se someta al veredicto de las urnas.

De manera más anecdótica, los presupuestos del próximo año incluyen una mayor eficiencia en el uso del alumbrado público, con el apagado durante algunas horas de la noche. Por otra parte, también cuentan con los ingresos que se recogerán de la llamada tasa Tobin, el impuesto a las transacciones financieras acordada por 11 países de la UE.

Asimismo, el Gobierno de Monti ha llegado a un acuerdo para reformar la Constitución italiana con el fin de reorganizar la estructura del Estado y permitir una mayor centralización del gasto y control presupuestario sobre los gobiernos regionales.