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Ryanair regresa a Valencia

La aerolínea reabrirá su base en noviembre tras firmar un acuerdo de promoción turística con la Generalitat

Ryanair regresa a Valencia. La aerolínea irlandesa de bajo coste ha firmado esta mañana un acuerdo de promoción turística con la Generalitat valenciana y ha anunciado que reabrirá su base en el aeropuerto valenciano de Manises en noviembre, dos años después de clausurarla por discrepancias con el gobierno valenciano y el Ayuntamiento de Valencia. La compañía se quejó de la falta de apoyo de las instituciones y estas rechazaron una aportación económica a la empresa para asegurar su permanencia.

El vicepresidente de la compañía aérea, Michael Cawley, ha anunciado la vuelta de Ryanair antes de firmar con la consejera de Turismo, Belén Juste, un convenio para que ambas partes promocionen destinos de la Comunidad Valenciana en los mercados turísticos europeos, especialmente Reino Unido, Alemania e Italia.

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El convenio tendrá una cuantía de 1,6 millones de euros. La Generalitat y Turespaña aportarán cada una 800.000 euros y la aerolínea el resto. El acuerdo es similar (aunque el importe sea más alto) que el que firmaron hace un par de meses la Generalitat y Turespaña con la compañía Air Berlín, ya que forma parte de un "convenio madre" entre las administraciones estatal y autonómica para la promoción turística.

Hasta ahora, las relaciones entre el Gobierno valenciano y Ryanair eran tensas después de que la compañía aérea cerrara en 2008 su base de operaciones en el aeropuerto de Manises por el supuesto escaso apoyo de las instituciones. La ruptura con la compañía irlandesa ha tenido un impacto notable en el número de pasajeros que han llegado a Valencia por avión. Una caída que alcanzó inicialmente proporciones del 30%.

La reapertura de la base supondrá que dos aviones de la aerolínea de bajo coste permanecerán fijos en Valencia. La compañía establecerá 31 rutas y espera que a lo largo de 2011 aportará dos millones de pasajeros a Manises. En parte porque se dispone a poner en marcha una de sus habituales operaciones de marketing ofreciendo medio millón de billetes a 10 euros.

Taxi aéreo de bajo coste

Manises se ha convertido en la primera base de Jet Ready, una compañía de taxi aéreo que empezó a operar el 7 de junio y aspira a competir en el segmento de vuelos privados gracias a las virtudes del aparato que manejan, un avión a reacción extremadamente ligero con capacidad para cuatro pasajeros. El Eclipse 500, un aparato de fabricación estadounidense, tiene una autonomía de tres horas de vuelo a una velocidad de próxima a los 600 kilómetros por hora y navega a la misma altura que un gran avión convencional, unos 10.000 metros, donde las turbulencias son escasas.

Ignacio López e Ignacio García, presidente y consejero de una sociedad en la que participan varios inversores valencianos y aragoneses, han diseñado un plan de negocio que prevé unas 400 horas de vuelo anuales por aparato, a un precio de alquiler de 1.800 euros por hora de vuelo para obtener beneficios en 2012. El aeropuerto de Manises, en Valencia, es la base de los primeros dos aviones, un tercero se instalará en Madrid a mediados de julio. La base de Barcelona empezará a ser plenamente operativa en agosto.

"Ofrecemos la máxima flexibilidad", presumen los promotores de Ready Jet, primera empresa europea autorizada a operar el Eclipse 500 y certificada para ofrecer su mantenimiento. El caso de un cliente de Murcia que se desplazó al sur de Túnez por motivo de negocios ilustra las posibilidades que ofrece el taxi aéreo. "El propietario de la empresa y dos técnicos volaron por la mañana, resolvieron sus negocios y, a última hora de la tarde, estaban de vuelta en Murcia. En otras condiciones deberían haber volado hasta París para llegar al sur de Túnez. Probablemente hubieron tenido que pasar una noche de hotel y habrían perdido horas y energía arrastrándose por los aeropuertos".

Jet Ready traslada esta tarde a un cliente de Barcelona que tiene que ir a cenar a París pero no puede quedarse a dormir. "Saldremos a las cuatro de la tarde de Barcelona y le esperaremos en el aeropuerto de Le Bourget hasta que termine. Muchos vuelos no pueden despegar desde Le Bourget por el ruido que generan, pero el Eclipse 500 es muy silencioso".

El aparato necesita 950 metros de pista nivelada, ni siquiera asfaltada. "En Ginebra hay una pista de hierba donde los controladores envían los aviones privados para facilitar las operaciones".

Los clientes potenciales pueden reservar sus vuelos a través de la página web de la compañía www.jetready.es, como en cualquier operador convencional. Con la diferencia de que trazan la ruta y pueden salir y aterrizar en cualquier aeroclub.

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