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PSOE y PP no consiguen acordar ni un marco genérico para el pacto educativo

Ambos se culpan del fracaso, que aleja el acuerdo que ha planteado Zapatero

Fue Aitor Esteban, un diputado del PNV, que desde su autonomía miran todo con más distancia, quien resumió la situación: "Ni siquiera se ponen de acuerdo en unas materias genéricas. Es sorprendente este encontronazo cuando el ministro anuncia su voluntad de un gran pacto de Estado sobre educación".

Durante 10 días, desde que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció su deseo de llegar a un pacto educativo con el PP, los dos grandes partidos han hinchado un globo que ayer se pinchó con estruendo en el pleno del Congreso. Después de varios intentos negociadores, ambos fueron incapaces siquiera de ponerse de acuerdo para votar un texto muy genérico de una proposición no de ley -esto es, con escaso valor normativo- que abría la puerta a un posible pacto.

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Inmediatamente después del pleno, en el que la moción que presentaba el PP fue rechazada por 146 a 187 votos -ningún otro grupo la apoyó- los dos partidos culparon al otro de romper el pacto. Los populares habían presentado un texto muy genérico que contenía una propuesta para reformar la primaria y la secundaria, pero no se especificaba cómo, más que con ideas genéricas de mejora y de "establecimiento de vías formativas adaptadas a los intereses y capacidades del alumno que conduzca al bachillerato o la formación profesional".

El PSOE, en un intento de encontrar un acuerdo, presentó una moción de sustitución igualmente genérica en la que eliminaba cualquier tipo de reforma y planteaba la necesidad de un pacto de Estado. Los socialistas añadieron cosas, como la incorporación de las nuevas tecnologías, que el Partido Popular estaba dispuesto a aceptar. Pero la negociación encalló en esa necesidad de hacer reformas legales que los socialistas no aceptaban, a la espera de que sea el ministro, Ángel Gabilondo, quien lidere esa iniciativa. Ambos se culparon de haber roto cualquier posibilidad de acuerdo, y así se llegó al pleno.

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El discurso del portavoz del PP, Juan Antonio Gómez Trinidad, ex consejero de Educación en La Rioja, fue muy duro y marcó un debate que aleja el pacto. "No es verdad que hayamos tenido muchos cambios de leyes educativas. Hemos tenido 25 años de educación socialista, con un buenismo, un todo vale, que ha bajado el nivel".

A pesar de la dureza, el diputado del PP aseguró que entre los dos grupos ha habido acercamiento "en algunas cosas", pero sentenció: "Ustedes no quieren pacto".

Le contestó Pilar Alegría, del PSOE, que recordó unas declaraciones recientes de Gómez Trinidad en las que señalaba que "las escuelas son una fábrica de parados". Así, en un asunto que teóricamente debería estar en el centro de uno de los dos grandes pactos propuestos por el presidente Zapatero, el ambiente se caldeó como en cualquier otro tema. "Cada vez que hablan de educación hablan de disciplina, mérito y esfuerzo pero no de aliento al profesorado. Deberían reconocer los avances que entre todos hemos conseguido", sentenció Alegría mirando a la bancada popular.

Nadie descartó abiertamente que el pacto pueda llegar, aunque todos lo veían lejano. Ahora queda por saber si en energía, el otro asunto del que ya hay conversaciones en marcha, el camino será similar.

El diputado del PP Cristóbal Montoro, en el Congreso.
El diputado del PP Cristóbal Montoro, en el Congreso.ULY MARTÍN

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