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La recesión afecta ya a 14 países de la UE, casi el 70% del PIB del área

La economía de la eurozona cayó el 1,6% en el cuarto trimestre de 2008 - El consumo y la inversión descienden en España por encima de la media

La economía europea se contrajo en el último trimestre de 2008 aún más de lo previsto hasta sumirse en simas no vistas en décadas. Son ya 14 los países comunitarios hundidos en la recesión y los analistas aventuran que en este primer trimestre de 2009 ha continuado el ahondamiento recesivo. Estos 14 suman cerca del 70% del PIB de la UE. Se considera que un Estado entra en recesión cuando registra dos trimestres seguidos de retroceso en tasa intertrimestral.

Eurostat, la agencia estadística europea, certificó ayer, a falta todavía de datos de tres países, que el producto interior bruto (PIB) de los 15 de la eurozona cayó el 1,6% en el trimestre otoñal y el 1,5% en el conjunto de la Unión Europea. Entre los grandes Estados europeos, únicamente Francia se salva de la recesión al haber registrado un único trimestre negativo, en concreto, el último de 2008.

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Los datos macro de España son peores que la media en algunos renglones para el cuarto trimestre de 2008: mayor caída en el consumo privado, más acusada retracción en la inversión, peor comportamiento de las exportaciones y, como para compensar lo anterior, mayor desaceleración de las importaciones. En conjunto, el PIB español retrocedió un 1% en el cuatro trimestre de 2008, frente a una media del 1,6% para la zona euro.

Perspectivas adversas

La situación económica en los Veintisiete no deja de empeorar y los ajustes a los datos provisionales siguen tozudamente saldándose a peor cuando quedan consolidados. Lo que hace un mes se estimaba como una retracción del 1,5% en el periodo octubre-diciembre se ha cerrado en el 1,6% para los 15 países que comparten la moneda única. Para los Veintisiete se da por bueno el anunciado recorte del 1,5%. En ambos casos, se trata del tercer trimestre negativo y consecutivo que registra Eurostat.

Es reseñable la acentuación de la caída con respecto al trimestre veraniego, cuando el PIB se contrajo el 0,3%, tanto en la eurozona como en el total comunitario. Y la economía va a seguir deprimiéndose. Una prognosis elaborada conjuntamente por el instituto alemán de investigación económica Ifo, la agencia estadística francesa INSEE y el centro italiano ISAE estima que el PIB de la eurozona se contrajo el 1,9% entre enero y marzo pasados.

Estos tres centros creen que la economía europea ya ha tocado fondo porque en primavera se retraerá ya el 0,6% y en julio-septiembre lo hará sólo el 0,2%. De ser así resultaría que los deseos y las medidas adoptadas por los Gobiernos comienzan a hacerse realidad.

La semana pasada en Londres, los líderes del G-20 no parecían estar muy seguros de ello porque acordaron volverse a reunir en otoño para ver qué efecto habían tenido sus decisiones y si hacían falta más.

A falta de conocerse los datos de Bulgaria y Rumania (que no han cifrado su PIB en todo el año) ni de Luxemburgo, son 14 los países europeos en recesión, siete de ellos miembros de la eurozona. De las grandes economías, sólo la francesa, segunda de la UE, escapa por ahora a la recesión formal marcada por dos trimestres negativos sucesivos, porque aunque presentó números rojos en octubre-diciembre, creció una décima el pasado verano. El motor económico europeo, Alemania, se contrajo un 2,1% en el último trimestre; la tercera economía, la de Reino Unido, que no acepta el euro, cayó el 1,5%; Italia cedió el 1,9%, casi el doble que España, quinta economía europea, que se replegó el 1%.

Si las cifras globales de España no son tan graves como las correspondientes a las otras grandes economías, el desglose de algunos renglones es muy malo. La caída del consumo privado del 0,3% en la eurozona casi se quintuplica, hasta el 1,4%, en una España con paro desbocado y contracción extrema del crédito. Para la inversión las cifras son del 4,0% y 5,2% de caída respectivamente. El retroceso de las exportaciones en los 15 de la moneda única fue del 6,7%, disparado hasta el 10,1% en España. Los datos de ese último trimestre certifican el desfondamiento del sector exterior español, que durante 2008 se había mantenido ligeramente positivo hasta despeñarse abruptamente en octubre-diciembre.

Tal retroceso exportador es fruto de la atonía económica europea y correlato natural de una caída de las importaciones en la zona euro del 4,7% (caída del 5,0% en la UE) que se dispara hasta el 11,9% en España.

Pero ningún país europeo presenta un panorama de devastación semejante al de Irlanda, el hoy desdentado tigre celta, que cerró el último trimestre con una contracción del 7,1%, la más alta de toda la Unión y se enfrenta a un 2009 para el que los analistas pronostican un 12,75% de caída del PIB a expensas de lo que disponga el plan de choque que prepara el Gobierno. En ese clima de depresión económica, frustración económica y desempleo, el Gobierno pedirá a los irlandeses, en fecha aún por determinar, que se pronuncien de nuevo en referéndum sobre el tratado de Lisboa.

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