_
_
_
_
_

Dijsselbloem vuelve a disculparse a medias y rechaza dimitir

Ni Guindos ni ningún otro ministro pide explicaciones al presidente del Eurogrupo en el interior de la reunión

Claudi Pérez
El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem.
El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem.DOMENIC AQUILINA (EFE)

Portugal exigió la dimisión de Jeroen Dijsselbloem, presidente del Eurogrupo, por sus declaraciones sobre la querencia de los países del Sur por "el alcohol y las mujeres" para después pedir rescates. España ha pedido reiteradamente explicaciones. Italia y Portugal cargaron hace unos días contra el holandés. Todo eso era para la galería: Dijsselbloem ha iniciado hoy la reunión con los ministros de la eurozona con un mea culpa a medias y nadie, ni un solo ministro, le ha pedido nada más. El jefe del Eurogrupo ha interpretado que los ministros "están satisfechos con las explicaciones", ha rechazado dimitir y ha asegurado que seguirá en el cargo mientras siga como ministro de Finanzas.

Lo más parecido a un reproche en La Valeta se ha producido antes del Eurogrupo: el secretario de Estado adjunto de Finanzas de Portugal, Ricardo Mourinho Felix (primo del entrenador del Manchester y ex del Madrid, Jose Mourinho), ha exigido una disculpa a Dijsselbloem antes de la reunión por sus "chocantes" declaraciones. "Quiero decirle que fue profundamente chocante aquello que dijo de los países que fueron rescatados", ha afirmado el portugués ante las cámaras, para después exigirle "disculpas ante los ministros y la prensa". Un incómodo Dijsselbloem ha subrayado que también le pareció chocante la reacción mostrada por Portugal (que ha pedido reiteradamente su dimisión, e incluso ha propuesto a su ministro para sucederle). "No voy a pedir disculpas", ha dicho, aunque después ha añadido que comentaría "alguna cosa" sobre el asunto a los ministros.

Y lo ha hecho. Dijsselbloem ha iniciado la reunión repitiendo sus respuestas a la Eurocámara en los últimos días. "Lamento la elección de esas palabras [sobre la querencia sureña sobre el "alcohol y las mujeres"], y que hayan causado daño", se ha limitado a decir, en un mensaje calcado a sus explicaciones desde la entrevista. Inmediatamente después, Dijsselbloem ha seguido con el sonsonete de siempre: la solidaridad es importante, "pero también cumplir las reglas". "Ningún ministro ha tomado la palabra después de las explicaciones, nadie ha pedido mi dimisión, así que interpreto que dan por buenas mis palabras", ha zanjado. "Voy a seguir como presidente del Eurogrupo mientras siga siendo ministro", ha reiterado.

En medio de las negociaciones para formar Gobierno en Holanda, donde su partido se ha dado un sonoro batacazo en las elecciones, Dijsselbloem no ve claro "si llegará antes el final de mi mandato [en enero de 2018] o mi trabajo como ministro", por lo que ha dejado en el aire su continuidad en función de lo que quieran los ministros del Eurogrupo. De momento, todos callan. Ni Luis de Guindos ni el portugués Mario Centeno ni el italiano Pier Carlo Padoan han dicho esta boca es mía en el interior de la reunión, pese a que todos ellos piden explicaciones ante la prensa. El griego Euclides Tsakalotos, ante los medios, ha explicado que las palabras de Dijsselbloem le parecen "una disculpa honesta" y ha dado por zanjado el asunto.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Claudi Pérez
Director adjunto de EL PAÍS. Excorresponsal político y económico, exredactor jefe de política nacional, excorresponsal en Bruselas durante toda la crisis del euro y anteriormente especialista en asuntos económicos internacionales. Premio Salvador de Madariaga. Madrid, y antes Bruselas, y aún antes Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_