_
_
_
_
_

España defenderá una PAC fuerte y pagos directos como apoyo a las rentas

El sector agrario y las comunidades autónomas plantean sus posiciones ante las futuras negociaciones de la reforma más allá de 2020

La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, en la inauguración de la conferencia Construyendo el futuro Post 2020, que debate la PAC.
La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, en la inauguración de la conferencia Construyendo el futuro Post 2020, que debate la PAC. Emilio Naranjo (EFE)

La Administración española defenderá en Bruselas la continuidad de la Política Agrícola Común (PAC) más allá de 2020 con fondos suficientes para asegurar el mantenimiento de los pagos directos como instrumento para apoyar la renta de los agricultores y ganaderos.

Este sería el punto principal de la posición española ante las futuras negociaciones para la reforma de la PAC de acuerdo con los planteamientos expuestos en los dos últimos días por las organizaciones del sector agrario, de la industria alimentaria y de las comunidades autónomas en las jornadas organizadas a este fin por el Ministerio de Agricultura.

Desde la posición española se considera que la PAC debe seguir siendo una política fuerte en el marco comunitario por ser un instrumento importante de cohesión, y además clave para la producción de alimentos suficientes en volumen, en calidad, seguridad y precios asumibles por los ciudadanos.

Desde el sector se apuesta por una política agraria que reconozca la diversidad de la agricultura mediterránea y su papel en el mantenimiento del medio rural. España defiende la necesaria internacionalización de los mercados con acuerdos equilibrados y de reciprocidad. Se aboga por una mayor simplificación en la aplicación de la misma y no exigir que cada explotación sea como una gestoría.

España es uno de los países pioneros en tratar de buscar, con una ley, un equilibrio en la cadena alimentaria y se reclama una norma comunitaria en el marco de la PAC que avance más en esta dirección para luchar contra las prácticas abusivas.

Frente a otras posibles vías de apoyo al sector como pagos contra cíclicos en función de los precios de los mercados o seguros de riesgo, se opta por defender el mantenimiento de los pagos directos para apoyar la renta agraria. España quiere que se profundice en la definición de la figura de los agricultores activos como destinatarios principales de los fondos y apuesta por mantener los pagos acoplados para una serie de producciones.

En contra de lo sucedido en los en los años precedentes, España quiere una política que ofrezca más apoyo para mejorar el comportamiento de los mercados así como medidas más ágiles para la gestión de crisis donde, por la lentitud en su aplicación los platos rotos los pagan los productores y clarificar las posibilidades de las organizaciones de comercialización de los productos agrarios frente a las barreras de Competencia.

Sector agrario y comunidades autónomas entienden que aunque la PAC ha jugado un papel fundamental en positivo en el sector agrario, existen lagunas que se deben superar como la gestión de las crisis y la ordenación de mercados, la modernización del sector, la mejora de las rentas, la incorporación de los jóvenes a la actividad o evitar el despoblamiento del territorio.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_