_
_
_
_
_

España mantiene el tipo

El mercado local, el quinto mayor de Europa, creció un 7% en 2016 gracias al turismo y la exportación

David Fernández
La alta gastronomía es un reclamo para los turistas. En la imagen, el restaurante El Celler de Can Roca.
La alta gastronomía es un reclamo para los turistas. En la imagen, el restaurante El Celler de Can Roca.

España ocupa el quinto lugar en el mercado del lujo dentro de la Unión Europea, por detrás de Francia, Italia, Alemania y Suiza. Las empresas españolas de productos y servicios de alta gama cerraron 2016 con una cifra de negocio conjunta de 6.000 millones de euros, lo que supone un incremento del 7% respecto a 2015.

La Asociación Española del Lujo (LS por sus siglas en inglés) atribuye este buen comportamiento “al turismo y las exportaciones”.

El 52% de los ingresos que genera esta industria en España son producto de las ventas en el exterior. En 2016 la exportación aumentó un 0,5% interanual. Por su parte, el consumo nacional representa el 27% de la facturación total de las empresas, cifra que mejoró un 2% respecto a 2015 “debido a la mejora económica”, según LS. El resto de las ventas se debe al gasto realizado por los turistas.

Una característica de la industria nacional del lujo es su alto grado de concentración. Barcelona concentra el 32% de las ventas de alta gama, mientras que Marbella se sitúa en segundo lugar con un 26%, seguida por Madrid (17%), Ibiza (9%) y Mallorca (6%). El resto de ciudades españolas solo supone el 10% del negocio.

En España, los artículos que mayor volumen de ventas concentran son los productos gourmet y belleza. En total representan unas ventas de 3.838 millones de euros anuales (el 63,9% del total). Por detrás de ellos en importancia se encuentran el turismo y los servicios de calidad.

Uno de los apartados a mejorar por parte del sector español del lujo es su presencia en el mundo digital. Solo un 31% de las firmas españolas vende sus productos a través del canal online, frente al 61% de las firmas internacionales. Los segmentos que mayor facturación generan a través de Internet son moda, calzado, accesorios, belleza y gastronomía. Por el contrario, las actividades que presentan un mayor retraso en este aspecto son automovilismo, joyería y arte.

Faltan grandes marcas

España es rica en artesanía, cultura, gastronomía, enología… Sin embargo, no cuenta con grandes marcas de lujo con presencia internacional. En el caso de la moda y los complementos, nuestro país es un referente en el sector textil dirigido al gran público con las propuestas de compañías como Inditex o Mango. Sin embargo, en el ámbito del lujo falta una marca referente en el ámbito mundial. Loewe, la enseña más emblemática, pertenece al gigante francés LVMH. El único grupo que podría codearse con los grandes del sector es Puig, con marcas reconocidas internacionalmente en el ámbito de los perfumes y moda.

“Las firmas españolas de lujo no pertenecen a multinacionales con las mismas tiendas globalizadas y con las mismas líneas de producto, ni tienen grandes presupuestos de marketing para hacer soñar”, reconocen en la Asociación Española del Lujo. “En España los valores de los productos y servicios se basan en la exclusividad y diferenciación, por su calidad y excelencia, así como por su tradición e innovación como valor diferencial”, añaden.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

David Fernández
Es el jefe de sección de Negocios. Es licenciado en Ciencias de la Información y tiene un máster en periodismo por EL PAÍS-UAM. Inició su carrera en Cinco Días y desde 2006 trabaja en EL PAÍS, donde se ha especializado en temas financieros. Ha ganado los premios de periodismo económico de la CNMV, Citigroup, Aecoc y APD.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_