El sector privado quiere ganar protagonismo en la acción social

El modelo latino frente al anglosajón. El pudor para comunicar las acciones de responsabilidad social corporativa frente a la normalidad con que el sector privado muestra, en Estados Unidos, su aportación a la sociedad. Esta diferencia en el modo en que las empresas afrontan sus proyectos sociales es una de las cuestiones que tanto el presidente de la consultora Deloitte, Fernando Ruiz, como el de la Fundación Seres, Francisco Román, quieren cambiar. "Las empresas no comunican activamente sus acciones sociales como sí hacen en el mundo anglosajón", aseguró Román.

Ambos presentaron este jueves el Informe del Impacto Social de las Empresas, que ambas entidades elaboran anualmente de forma conjunta. En él se cifra en 438 millones de euros la inversión total dedicada a acciones sociales por parte de las 68 empresas incluidas en el estudio, una cantidad que supone el 1,3% del beneficio de estas compañías, que representan el 20% del PIB de España y suman más de 938.000 empleados. Entre ellas hay empresas como El Corte Inglés, Bankia o Endesa.

Esta inversión ha tenido impacto en unas 16 millones de personas — en 11,7 millones de ellas de forma directa—: el 57% se ha concentrado en proyectos en España y el 43% restante en programas en el extranjero. "La acción social de las empresas en España es estable, no es una moda pasajera", dijo el máximo directivo de Deloitte, que propuso la creación de un índice sobre inversión en acción social que homogeneice los baremos para medir las aportaciones de las empresas a la sociedad. "Debería informarse de ello en junta de accionistas tal y como se hace con el dividendo", dijo.

En materia de empleo, siete de cada 10 empresas han contribuido a integrar laboralmente a colectivos desfavorecidos. Como resultado, 38.239 personas en riesgo de exclusión consiguieron un empleo en 2014, el 34% de ellos en las compañías participantes. Además, el pasado año las 68 empresas del estudio realizaron en total más de 5.500 proyectos de actuación social. La inversión media en el ámbito del empleo y la integración laboral fue de 222.600 euros por proyecto.

Cada euro en gasto social de estas empresas sirvió para captar una inversión adicional de un 1% procedente de otros organismos privados y públicos. El presidente de Seres se refirió al papel de estas últimas, las Administraciones, como facilitadoras de la acción social privada. "Creo que colaboran y crean un marco para la inversión pero aún nos queda camino por recorrer como sociedad".