La petrolera brasileña OGX termina las negociaciones con sus tenedores sin un acuerdo
La petrolera brasileña OGX anunció hoy el fin de las conversaciones con los tenedores de sus bonos por valor de 3.600 millones de dólares sin llegar a un acuerdo para reestructurar su deuda después de meses de negociaciones.
La compañía, controlada por el multimillonario Eike Batista y que no ofreció detalles sobre las causas del fracaso de las negociaciones, tenía plazo hasta el viernes para alcanzar un acuerdo con los acreedores.
El fracaso en las negociaciones puede obligar a la empresa a solicitar la protección por quiebra, según fuentes apuntadas por medios locales.
A principios de mes, la petrolera comunicó al mercado la suspensión del pago de unos 45 millones de dólares en intereses referentes a títulos emitidos en el exterior y que vencían el 1 de octubre.
La noticia fue recibida en el mercado de Sao Paulo como un primer paso hacia una posible declaración de quiebra de la compañía, que en total tiene emitidos bonos por un valor cercano a los 3.600 millones de dólares, con vencimientos que llegan hasta el 2022.
Tras la suspensión de pagos, la OGX comunicó que tenía "30 días para adoptar las medidas necesarias sin que sea caracterizado el vencimiento anticipado de la deuda".
Luego de haber caído este año a sus menores valores históricos por los problemas financieros de la empresa, las acciones de la petrolera subieron en los últimos días ante versiones de que podría recibir una inyección de capital de inversionistas que negocian la reestructuración de la deuda.
Pero este martes, tras una hora de negocios en la bolsa de Sao Paulo, caían un 20,69 % como consecuencia del anuncio del fracaso de las negociaciones.
