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El Eurogrupo quiere reformas a cambio de cesiones en el déficit

El presidente Jeroen Dijsselbloem reclama "trabajar más tiempo y más duro" El político holandés reitera que "nada hace pensar" que haya que alargar las ayudas a la banca

Foto: atlas | Vídeo: ATLAS
Claudi Pérez

Jeroen Dijsselbloem tiene un plan. El presidente del Eurogrupo visitó este lunes Madrid con buenas noticias para el Gobierno español: dio por prácticamente segura una salida “limpia” del rescate bancario. Y apareció también con una nueva propuesta bajo el brazo. Acabada la fase aguda de la crisis, Bruselas teme que los socios del euro frenen la agenda de reformas; Berlín quiere evitarlo con un nuevo mecanismo, los contratos que obliguen a los países con compromisos firmados a hacer lo que haga falta, pero se ha topado con las reticencias de París, Madrid, Roma y todo el frente meridional. Dijsselbloem presentó un plan alternativo: los socios del euro solo obtendrán tiempo extra para recortar su déficit público (algo que muchos países van a necesitar) a cambio de un paquete de reformas estructurales con plazos tasados. “Quizá se pueda decir que son reformas por contrato, pero hay diferencias con el esquema alemán, por ese vínculo con los plazos adicionales para cumplir el déficit”, dijo.

Tanto Bruselas como Berlín conocen ya los planes del presidente del Eurogrupo. Y el frente meridional, que rechaza de plano los contratos alemanes sin alguna contrapartida, parece algo más favorable en este caso. “El plan de Dijsselbloem tiene sentido”, explicaron fuentes del Ejecutivo español.

Dijsselbloem despachó con Rajoy y con el ministro Luis de Guindos sobre España. Más allá de la salida del rescate, se declaró “optimista” y explicó que el Gobierno “ha hecho los deberes, aunque hay que seguir con reformas como la laboral”. “Además, la economía española se beneficia de la estabilidad política, algo que está menos claro en países como Italia”, apuntó en un encuentro con EL PAÍS, La Stampa, Frankfurter Allgemeine y Financial Times tras una charla en el foro Nueva Economía. Italia, en fin, es la nueva frontera de la crisis europea, junto con la complacencia de los Gobiernos que anuncian el adiós a la crisis con toda la fanfarria: “Está desapareciendo el sentimiento de urgencia; la Comisión Europea tiene serias dificultades para que los socios del euro sigan sus recomendaciones. La solución puede ser vincular el tiempo extra para el déficit a un compromiso firme con las imprescindibles reformas”, recalcó.

Por el flanco de la banca, el Eurogrupo no espera grandes sorpresas de los exámenes del BCE. Por el del crecimiento, vaticina buenas noticias. Y para seguir con las reformas, Madrid fue la ciudad elegida por Dijsselbloem para anunciar su plan. Pero el jefe del Eurogrupo es consciente de que esa propuesta está a la espera del veredicto de Alemania; de la opinión de Angela Merkel. “Todo el mundo tiene un plan —hasta que doy el primer puñetazo en la cara”, decía aquel boxeador increíble, el loco de Mike Tyson.

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Sobre la firma

Claudi Pérez
Director adjunto de EL PAÍS. Excorresponsal político y económico, exredactor jefe de política nacional, excorresponsal en Bruselas durante toda la crisis del euro y anteriormente especialista en asuntos económicos internacionales. Premio Salvador de Madariaga. Madrid, y antes Bruselas, y aún antes Barcelona.

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