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Sacyr negocia con la banca una quita en Vallehermoso para poder venderla rápido

La promotora cuenta con un parque de 600 viviendas y 7,25 millones de metros de suelo

Sacyr quiere vender "cuanto antes" Vallehermoso, su división de vivienda y suelo, y para ello trabaja en distintas alternativas, conversa con inversores y ha solicitado a sus bancos una quita de la deuda de 1.217 millones que suma la filial, el 15% del pasivo total del grupo. Así lo ha indicado el presidente del grupo, Manuel Manrique, quien ha subrayado la liquidación de su negocio residencial como el objetivo prioritario y más importante de Sacyr.

En cuanto a su participación del 9,5% en Repsol, el presidente de Sacyr la ha definido como "estable, constructiva y amigable". No obstante, dejó de nuevo abierta la puerta a eventuales futuras desinversiones al reiterar que "ante cualquier circunstancia, siempre prevalecerá la fortaleza de Sacyr".

"Tenemos sobre la mesa todos los escenarios posibles y buscamos de forma muy activa soluciones de cualquier tipo para solventar cuanto antes este negocio que no marcha como nos gustaría", ha asegurado Manrique sobre Sacyr en la rueda de prensa previa a la junta de accionistas del grupo de construcción y servicios. "Conversamos con muchos fondos de inversión, con industriales y pedimos quitas a los acreedores, con quien trabajamos conjuntamente para buscar una solución amistosa", ha detallado.

La compañía no tiene plazo alguno para liquidar este negocio, si bien pretende hacerlo "cuanto antes", dado que se trata de un "objetivo prioritario". Vallehermoso cuenta actualmente con un stock de 600 viviendas y una cartera de suelo de 7,25 millones de metros cuadrados. A cierre del 2012, el valor de mercado de las existencias de esta filial se situaba en 1.848 millones de euros, según la tasación de BNP Paribas.

Sacyr ya descolgó hace un año de su marca corporativa la denominación de Vallehermoso, y ahora saldrá oficialmente de los estatutos de la compañía en virtud del cambio que el grupo somete mañana a la aprobación de su junta de accionistas. En el capítulo de desinversiones, también se incluye la Torre Adrià que el grupo tiene en París, cuya venta, según Manrique, está

Por otra parte, Manrique ha avanzado que van a nombrar nuevos consejeros con el fin de adecuar su consejo de administración a la "transformación" que su accionariado ha experimentado en los últimos meses con la salida de Juan Abelló y las antiguas cajas de ahorros y la entrada de nuevos fondos de inversión.

En la actualidad, el máximo órgano de gestión de Sacyr cuenta con cuatro vacantes, tras la salida de los dos representantes de Abelló y los otros dos de NCG Banco.

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