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Las grandes superficies plantean más horas de trabajo y bajadas de sueldo

La patronal quiere ligar los salarios a la evolución del consumo, hundido durante la crisis

Manuel V. Gómez

Trabajar más y ganar menos. Esta es la receta que propone la patronal de los grandes almacenes (Anged) —integrada por El Corte Inglés, Carrefour, Ikea, Cortefiel, C&A, Alcampo, Leroy Merlin, Eroski, entre otras cadenas— ante la caída continuada del consumo y, por tanto, de su facturación. Empresarios y sindicatos han comenzado a negociar la renovación del convenio del sector para los próximos cuatro años. La patronal ya ha entregado su propuesta, contiene importantes recortes de sueldos y un aumento del número de horas. Los sindicatos —los sectoriales (Fetico y Fasga) y los federales (UGT y CC OO)— la han rechazado.

En negro sobre blanco, la propuesta de Anged, que afecta a unos 230.000 empleados, se concreta en la eliminación de una de las pagas extra (tiene cuatro) hasta que se alcance una facturación conjunta en el sector igual o superior a la de 2008; y la congelación de las tablas salariales de 2013 a 2016, que pueden incluso reducirse entre un 2% y un 5% si no se supera la facturación de 2005. En este capítulo, el texto se completa con medidas que permiten a las cadenas descolgarse automáticamente de este convenio en el conjunto de la empresa o en cada centro de trabajo.

Las cláusulas que contiene la propuesta de convenio de la patronal garantizan en la práctica una bajada de sueldos en el sector. El comercio minorista en España, según el INE, lleva perdiendo ingresos desde 2008. Siguiendo la misma fuente también han caído desde entonces en las grandes superficies. Por tanto, se antoja difícil volver a niveles de facturación aproximados a los de 2008 o de 2005 en un futuro próximo, más todavía si se tiene en cuenta la comatosa situación de un mercado laboral que tendrá durante varios años una tasa de paro superior al 20%.

Por lo que respecta al tiempo de trabajo, Anged ha planteado una posición que aumenta significativamente el número de horas anuales de 1.770 a 1.826 (40 horas semanales, el máximo permitido por el Estatuto de los Trabajadores). Además, los empresarios también buscan cambios en la distribución de esta jornada. Hasta 2012 esa distribución se hace anualmente y se informaba de ella con tres meses de antelación, desde este año, según la propuesta patronal, se hará mensualmente y se informará con 10 días de antelación.

“Estamos en tiempo de negociación y no vamos a valorar cada propuesta concreta”, han afirmado desde Anged. No obstante, sí que entraban a justificar su propuesta. “Estamos en un momento de debilidad, ha caído la facturación de las empresas y los costes laborales desde 2008 han subido un 9%”, continua un portavoz oficial, que exponía que estas propuestas se hacen a cambio de mantener el empleo.

Los sindicatos del sector, por su parte, rechazan en bloque las medidas patronales. La propuesta incluso ha logrado algo extraño en el sector: que coincidan los sindicatos sectoriales, Fetico y Fasga, y los federales, UGT y CC OO.

Desde la central mayoritaria, Fetico, su vicesecretario general, Antonio Pérez, reclama a los empresarios un cambio de actitud: “La patronal tiene que cambiar de actitud. El jueves [cuando se celebrará la siguiente reunión] no debería venir con una propuesta cerrada y decir o la tomas o la dejas”. UGT, por su parte, expone sus propuestas, a grandes rasgos, un convenio bienal y el mantenimiento del poder adquisitivo.

Por otra parte, la patronal química (Feique) y los sindicatos han firmado su nuevo convenio colectivo. En él se vincula la evolución de los sueldos a la marcha de la economía. Así el año que viene los salarios de los 250.000 trabajadores del sector subirán un 0,2% si en 2013 el PIB crece un 1%, si supera ese porcentaje, el aumento será del 0,4%. También, según informa Europa Press, se fija una jornada anual de 1.752 horas.

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Sobre la firma

Manuel V. Gómez
Es corresponsal en Bruselas. Ha desarrollado casi toda su carrera en la sección de Economía de EL PAÍS, donde se ha encargado entre 2008 y 2021 de seguir el mercado laboral español, el sistema de pensiones y el diálogo social. Licenciado en Historia por la Universitat de València, en 2006 cursó el master de periodismo UAM/EL PAÍS.

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