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Las empresas familiares quieren tener más presencia en la política exportadora

Un informe del IEF pide ventajas fiscales a la expansión exterior "tan pronto lo permita el déficit"

Thiago Ferrer Morini

El Instituto de la Empresa Familiar (IEF), que aglutina a casi un centenar de grandes sociedades de este tipo en España, ha pedido al Gobierno un mayor protagonismo del sector privado a la hora de orientar las políticas de apoyo público a la exportación. En un informe elaborado en colaboración con la consultora Equipo Económico, el instituto también ha solicitado revisar y flexibilizar el sistema público de financiación a la exportación, así como mayores ventajas fiscales a las empresas que vendan en el exterior "tan pronto salgamos del déficit", en palabras del director general del IEF, Andrés Tejero.

El informe propone "alinear" las políticas de exportación con las necesidades del sector privado, a través de una mayor presencia de las empresas en el consejo de administración de las sociedades públicas del sector, como ICEX España, el antiguo Instituto de Comercio Exterior. Al mismo tiempo, la organización preconiza una menor presencia de las organizaciones públicas en los sectores y mercados "ya maduros", como pueden ser Estados Unidos, Reino Unido o Brasil. "El camino que está abierto no necesita más ayudas", ha afirmado Tejero durante la presentación del informe. "Tenemos que ir a otros mercados con otros productos, y el apoyo público a la exportación debería derivarse a las empresas que realmente necesiten ayuda". El informe estima que el gasto total, tanto público como privado, para el fomento de la internacionalización, ascendió en 2011 a 1.200 millones de euros.

El documento también sostiene que el sistema de financiación a la exportación, incluyendo los seguros de crédito, debe ser revisado con el fin de mejorar la coordinación y la especialización del sistema. El objetivo, afirma el IEF, es aumentar el número de proyectos financiados, al permitir a las entidades correr más riesgos y que puedan ofrecer mejores condiciones a las pymes. El informe también aplaude la centralización de las oficinas de promoción de las empresas españolas en el extranjero y pide que el servicio exterior esté "volcado hacia la diplomacia comercial".

A medio y largo plazo, el IEF ha querido "recordar" al Gobierno que la internacionalización de las empresas requiere "un marco fiscal competitivo", según Tejero, "ya ha existido", y que el Ejecutivo "seguro que ya tiene en mente recuperar", pero que, admite, deberá esperar al cumplimiento del "objetivo prioritario", la reducción del déficit público. Entre los beneficios fiscales que propone la organización están el incorporar la titularidad de activos en el extranjero para valorar la solvencia de una entidad y hacer que los empresarios y profesionales autónomos tengan las mismas exenciones en el pago del IRPF que tienen los trabajadores por cuenta ajena que reciban un salario en el extranjero.

Durante nuestras crisis económicas, la recuperación siempre ha venido del exterior” Ricardo Martínez Rico

El informe resalta la importancia de las exportaciones como motor de la recuperación económica española. "Durante nuestras crisis económicas, la recuperación siempre ha venido del sector exterior", afirma Ricardo Martínez Rico, director de Equipo Económico. Tanto él como Aleix Pons, director del Servicio de Estudios del IEF, han coincidido en que las exportaciones crecerán durante 2013, aunque no han querido arriesgarse a precisar en qué medida. Entre los factores que, según el informe, han contribuido al aumento del mercado externo destaca la mejora de la competitividad debida al descenso en los salarios reales provocado por la crisis. El documento también destaca la importancia de las inversiones españolas en el exterior, que han pasado de representar un 3,6% del PIB en 1996 a más de un 50% en 2011.

Aún así, afirma, el sector exterior conserva ciertas debilidades estructurales: una excesiva dependencia del comercio con la Unión Europea (destino de casi un 70% de las exportaciones entre 2005 y 2012), el hecho de que España exporta un número limitado de productos, muchos de ellos de baja intensidad tecnológica en comparación con los países vecinos, y, sobre todo, el que el 86% de las exportaciones esté cubierto por las grandes empresas, que suman un 4% de las 123.000 empresas que venden sus productos en el exterior.

El director general del IEF también dio su aprobación a la política económica del Gobierno y emplazó al Ejecutivo a que "perseverase en la dirección correcta". Con respecto a la posibilidad de un rescate europeo para España, Tejero, tras indicar que no podía dar una opinión en nombre del instituto, consideró que "no le gustaba la connotación negativa de la palabra rescate", que, indicó, "no deja de ser financiación". Desde su punto de vista, los beneficios de una mayor facilidad de las empresas para obtener liquidez supera cualquier daño que una petición de rescate pueda tener para la imagen de España y que el Gobierno debería "hacer lo que tenga que hacer" para mejorar las condiciones de la deuda "sin que nos saquen los ojos". 

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