La escasa vendimia anticipa una subida del precio del vino
El recorte de la producción de uva se estima en un 15%
La vendimia registrará esta campaña un recorte del 15%, según las estimaciones de las organizaciones del sector y como consecuencia de la falta de lluvias de los últimos meses. Frente a los 39 millones de la campaña pasada, para este año las previsiones apuntan a una cosecha de entre los 33 y los 34 millones de hectolitros. Para las Cooperativas Agroalimentarias la cosecha se cifra en 33 millones de hectolitros.
En la zona Duero, frente a una cosecha media de unos 90 millones de kilos, para esta campaña las previsiones apuntan un recorte de casi el 30% para situar la misma en solo unos 60 millones de kilos. Los precios podían elevarse hasta los 0,80 euros kilo.
En Rioja se espera igualmente un recorte del 30% frente a una producción en la campaña anterior de unos 400 millones de kilos. Los agricultores esperan también subidas de precios frente a las bajas cotizaciones pagadas en la campaña anterior ante la existencia de excedentes y el poder dominante de las bodegas
La subida de los precios podría frenar las ventas en el exterior
Las previsiones de una cosecha corta han supuesto también un incremento generalizado de los precios de la uva en las zonas más productoras. En Castilla-La Mancha, que supone aproximadamente el 50% de la producción total, los precios de la uvas han situado en una media de 4,30 pesetas kilogrado (unidad de cuenta en lonja), lo que equivaldría a más 0,30 euros kilo, cotizaciones que son similares para variedades blancas y tintas.
Para las cooperativas, la producción será de 17 millones de hectolitros. Esta situación se repite en Extremadura con una cosecha de solo 2,6 millones de hectolitros, en Cataluña con 2,7 millones y en la Comunidad Valenciana con 1,7 millones de hectolitros. En Galicia la caída esperada es del 30%.
La calidad de la uva es buena por la ausencia de plagas y enfermedades, con un bajo grado de azúcar y calidad moderada.
Las previsiones de cosecha son igualmente a la baja en Italia, con menos de 40 millones de hectolitros y 44 millones en Francia frente a cosechas por encima de los 50 millones de hectolitros. Esta situación está provocando una mayor demanda de mostos y vinos a granel por parte de ambos países para atender su consumo interno y para exportaciones.
En 2001, España batió su propio récord de ventas en el exterior, con 22,3 millones de hectolitros frente a una demanda interior de solo diez millones. En lo que va de campaña, se ha mantenido el nivel de las exportaciones, mientras en el mercado interior ha seguido cayendo la demanda en la restauración y experimentado un ligero incremento el consumo en los hogares. La subida de los precios podría frenar las ventas en el exterior.
