_
_
_
_
_
Propiedades

Un REIT casi como los de verdad

Cotizar en el parqué es un escollo para las socimi españolas

  Todos los recipientes son pocos para enjugar la inundación de activos adjudicados en manos de la banca. Un ejemplo de contenedor cuya boca se preve ensanchar son las Socimi (Sociedades Cotizadas de Inversión en el Mercado Inmobiliario), a través del anteproyecto de ley de medidas de fomento del alquiler. Se modifican porque no han funcionado y el problema está en la "c". El REIT español siguió a los de otros países con mucho retraso y fue a nacer en octubre de 2009, en plena crisis.

Mal momento para tener que saltar al parqué sobre todo si eres inmobiliario. Cristino Fayos, de Deloitte, tiene claro que el mayor escollo es que sean cotizadas. En su opinión se podría eliminar el requisito de exigencia de cotización "ya que existen fórmulas para controlar a estas entidades y proteger al inversor, como por ejemplo a través de la auditoría".

En cualquier caso, considera una buena noticia que la norma flexibiliza los requisitos mínimos de capital en circulación (pasa del 25% al 15%) y número de accionistas (de 100 pasa a 50), si bien entiende que debería admitirse la posibilidad de cotizar en otros mercados, como el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) con una regulación y proceso más flexibles. Y, sobre todo, valora que se vaya a eliminar el requisito del nivel máximo de endeudamiento permitido, que antes tenía que ser inferior al 70% del activo.

Otro importante escollo eliminado es la distribución obligatoria del dividendo de beneficios que se reduce del 90% al 50%. "Si el régimen de las Socimi no ha tenido éxito no ha sido tanto por el régimen fiscal sino por la posibilidad de cumplir los requisitos sustantivos, máxime en la coyuntura actual", anota Fayos.

"Para que las Socimi sean atractivas también es interesante la reducción del capital social de 5 a 15 millones de euros". Otra novedad es que los inmuebles en arrendamiento promovidos por la entidad pasan de tres a siete años y se elimina el requisito de diversificación de los inmuebles.

Vanessa Gelado, desde Drago Capital -uno de los grupos que se postulan como gestoras de las sociedades que la banca creará con sus adjudicados- admite que el hecho de que se incrementen las rentas exentas del 20 al 25% -cuando más del 50% del activo de la entidad esté constituido por viviendas- en arrendamiento es alentador, aunque piensa que se podía haber avanzado algo más en homogeneizar la fiscalidad de este tipo de sociedades con las de otras jurisdicciones europeas.

El anteproyecto contempla también que el tipo de gravamen de las rentas será del 19% y que las Socimi tributarán según el resultado del ejercicio en el Impuesto de Sociedades.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_