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La inflación se modera por primera vez en los últimos ocho meses

El descenso del petróleo y de los servicios turísticos enfrían el IPC, que pasa del 3,8% al 3,5% en mayo

Un crecimiento estancado, un volumen de paro histórico y una inflación pujante reactivaron todas las alertas sobre la economía española en el arranque del año. Pero, al menos en el frente inflacionista, ya llueve menos. Tras ocho meses de subida de precios continua, el Índice de Precios al Consumo (IPC) cedió al fin en mayo, según el avance publicado por el Instituto Nacional de Estadística: el mes habría acabado con una tasa interanual del 3,5%, tres décimas menos que en abril. Y, según los expertos, enfila una cuesta abajo que le llevará cerca del 2% a finales de año.

La rápida recuperación de las economías emergentes tras la Gran Recesión devolvió el precio del petróleo al territorio de los 100 dólares por barril a principios de año, una frontera inexplorada desde la vertiginosa escalada de 2008, cuando el brent llegó a rondar los 150 dólares. La inflación superó entonces el 3%, pero los expertos contaban con que comenzaría a perder fuerza en febrero. El estallido de las revueltas en el norte de África hizo añicos las previsiones: los mercados internacionales tradujeron la incertidumbre en nuevas subidas del crudo y el IPC se elevó al 3,8% en abril.

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La inflación de la zona euro también cede en mayo

El repunte inflacionista alimentado por el petróleo cogió a la economía española en el peor momento posible, con la demanda interna congelada. La inesperada subida de los precios de consumo es un golpe para el poder adquisitivo de muchos ciudadanos, con rentas maltrechas por el desempleo y el agotamiento de ayudas públicas tras más de dos años de crisis. Además, complica sobremanera la negociación de los convenios, justo cuando las empresas exigen moderación salarial para salir de la crisis. Y ha llevado a la primera subida de tipos en la zona euro desde 2008, un endurecimiento de las condiciones financieras que se ha trasladado ya al coste de las hipotecas.

Como no podía ser de otra manera, el ansiado retroceso de la inflación en mayo ha venido de la mano del precio del petróleo. Tras la rápida resolución de las revueltas en Túnez y Egipto, el estancamiento en otros conflictos (Libia, Yemen, Siria) ha aquietado a los mercados internacionales. Si en la primera quincena de abril el brent sobrepasó los 125 dólares, en este mes se ha anclado cerca de los 115, un nivel aún elevado, pero menor. La nota difundida por el INE avanza que, además de los precios energéticos, también contribuyeron a esa moderación (del 3,8% al 3,5%) los precios de algunos servicios turísticos, como los viajes organizados. Todo indica que las diferencias de calendario (la Semana Santa cayó en abril este año, cuando en 2010 fue en marzo) han sido determinantes en esta evolución.

El detalle de la estadística se conocerá en un par de semanas. Hasta entonces no se podrá comprobar si también se ha interrumpido la subida de los precios de los alimentos que, con cierto retraso, estaban reproduciendo la escalada en los mercados internacionales de materias primas (azúcar, café, cereales) que se produjo en el trimestre pasado. Lo que sí dan por hecho los expertos es que el retroceso de la inflación se consolidará en los próximos meses. En esas previsiones hay un caballo ganador: a partir del 1 de julio, en la comparación interanual dejará de pesar la subida del IVA (del 16% al 18%), que se puso en vigor precisamente en esa fecha el año pasado.

Los expertos del Instituto Flores de Lemus (adscrito a la Universidad Carlos III de Madrid) destacan además la irrupción de un invitado inesperado, "el comienzo de una guerra de precios entre las tabacaleras", que se dejará notar ya en junio. El tabaco es uno de los componentes más inflacionistas del IPC. En diciembre, además, el sector aprovechó una nueva alza de impuestos decidida para el Gobierno para subir los precios más aún que lo que suponía el recargo fiscal, según el análisis del Banco de España. Pero la debilidad de la demanda (la venta de cajetillas se redujo un 20% en el primer cuatrimestre), en la que también influyó la prohibición de fumar en espacios cerrados, ha acabado por imponer su ley. Flores de Lemus cree que en junio la guerra de precios se reflejará en la tasa interanual del tabaco, que descenderá, según su previsión, del 20% al 10%.

La publicación del avance del IPC español antecede al indicador adelantado de la zona euro, que Eurostat divulgará este martes. Aquí también habrá un frenazo en la subida de precios (2,8% en abril). De su intensidad estará muy pendiente el Banco Central Europeo, que se ha tomado hasta julio para decidir si reanuda las subidas de los tipos de interés, ahora en el 1,25%.

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