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Salgado destaca que España será de las que menos recaude con la tasa a la banca

La UE contempla un abanico amplio de impuestos al sector financiero.- Un 0,1% sobre las transacciones recaudaría 372.000 millones en el conjunto de Europa

Antes de lo previsto se ha roto el tabú. La aplicación de impuestos y tasas a la banca para desanimar las operaciones especulativas o simplemente aumentar la recaudación está ya en el orden del día de la Unión Europea. Los ministros de Economía de los Veintisiete debatirán hoy formalmente la forma de aplicar este tipo de gravámenes a las entidades financieras. La Comisión Europea presentó ayer un documento de trabajo non paper en el que se analizan distintas posibilidades y su capacidad recaudatoria. Para la ministra española, Elena Salgado, España estaría "en la banda baja" de la UE en cuanto a la recaudación por estos impuestos, según ha afirmado esta mañana en declaraciones recogidas por Efe.

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Además, Salgado ha adelantado que el Gobierno español se plantea destinar al presupuesto público la recaudación de la nueva tasa bancaria, si finalmente es aprobada en el seno de la Unión Europea. Así, la ministra defiende que España tiene una "posición mixta" frente a la Comisión Europea, que apuesta por que el dinero recaudado alimente una red de fondos (uno por cada Estado miembro) para sufragar las futuras bancarrotas del sector, y otros países como Francia y Reino Unido, que ya han anunciado sus intenciones de destinarlo al presupuesto público. La razón es que ya cuenta con un fondo de garantía de depósitos.

"Si decidiéramos que (el fondo de garantía de depósitos) sea ampliado a otros pasivos distintos de los depósitos, porque ese fuera el consenso (en el seno de la Unión Europea), nosotros también nos plantearíamos una posible utilización presupuestaria", ha afirmado Salgado al término de la reunión de ministros de Finanzas de la UE, en el que se ha discutido el asunto.

El documento de la Comisión propone en principio dos tipos de impuestos. La Tasa a las Transacciones Financieras (TTF), inspirada en la llamada Tasa Tobin, que se aplicaría al tráfico de operaciones financieras y la Tasa sobre la Actividad Financiera (TAF), que gravaría el volumen de negocio de las actividades. La Comisión no ha incluido otras figuras que se han aplicado ya en algunos países como los impuestos a los bonos de los directivos, un recargo al impuesto sobre la renta en el sector financiero y la Tasa a las Transacciones en Divisas, por estimar que ya están incluidas de alguna manera en alguno de los dos grupos.

Sobre la TTF, que ha sido promovida por el Parlamento Europeo, el Partido de los Socialistas Europeos (PES) y varias ONG, Bruselas propone dos opciones. Una primera sobre una base amplia, (TFF1), que gravaría todo tipo de operaciones realizadas con acciones, obligaciones, bonos, divisas y productos derivados y que según el Instituto de Investigación Económica de Austria tendría una capacidad de recaudación que oscilaría entre los 145.000 y los 372.000 millones de euros anuales, aplicando un tipo del 0,1% sobre el volumen de las transacciones. Esta figura presenta, sin embargo, muchos inconvenientes como es la recaudación de las operaciones de productos derivados, la mayor parte de las cuales se realizan fuera de mercado en transacciones bilaterales. Otro inconveniente es que un 71% de la recaudación, se la llevaría Reino Unido, que es donde se realizan estas operaciones.

Otra versión más restringida es la llamada TFF2, que prevé gravar solo las transacciones efectuadas con acciones y bonos. En este caso la recaudación obtenida oscilaría entre los 57.000 y los 64.000 millones anuales.

La otra medida en estudio es la Tasa sobre la Actividad Financiero (TAF) que gravaría los beneficios y las remuneraciones pagadas por las actividades financieras sobre la que también se han considerado varios escenarios. Uno de los modelos diseñados prevé una recaudación de 26.200 millones de euros anuales en el conjunto de la UE. La TAV tiene la ventaja de poder aplicarse de manera claramente diferenciada en cada país. Siguiendo el ejemplo citado, en el caso de España supondría una recaudación de 1.900 millones de euros anuales, mientras que Alemania y Francia lograrían 4.400 y 3.200 millones de euros respectivamente.

"Yo creo que nosotros estaríamos siempre en la banda baja, dado que habría que descontar lo que ya es el fondo de garantía de depósitos y nuestras entidades no son las que más utilizan otro tipo de pasivos distintos de los depósitos", ha explicado hoy Salgado. Tras la reunión, ha explicado que "se ha avanzado mucho en los últimos seis meses" sobre este asunto, sobre el que los ministros han expresado en general "una opinión favorable" durante la reunión de hoy, aunque "todavía no hay consenso total porque no se han acordado los detalles. En este sentido, la vicepresidenta segunda del Gobierno se muestra contraria a que el gravamen pese sobre el capital de las entidades.

Estos impuestos son completamente independientes de las tasas previstas en la reforma financiera que probablemente se aprobará a finales de mes, para constituir dos fondos. Se trata de un Fondo de Resolución Bank Levy, constituido a base de contribuciones o tasas a los bancos para disponer de recursos suficientes para ayudar a reflotar o liquidar las entidades fallidas. Otro fondo, también formado con contribuciones servirá para disponer de los recursos necesarios para garantizar los depósitos de los particulares, que actualmente cuentan con garantía mínima de 100.000 euros por cuenta.

España, que ya cuenta con un fondo de garantía para asegurar los depósitos de los clientes y hacer frente a las posibles crisis, deberá separarlo en dos entidades.

Por otra parte, los ministros de Economía celebraron ayer la reunión de la Task Force, bajo la presidencia de Herman Van Rompuy, presidente a su vez del Consejo Europeo, para analizar las medidas para reforzar el Gobierno económico de la UE. La vicepresidenta Elena Salgado se mostró ayer contraria a la imposición de sanciones a los países que incurran en déficit excesivo que impliquen la pérdida de fondos estructurales y de cohesión.

"Nosotros creemos que hay que tener mucho cuidado con los fondos estructurales y de cohesión, que a eso no debería afectar". Salgado admitió otro tipo de sanciones como las multas pero recordó que esto ya está previsto.

Elena Salgado, en el centro, conversa con el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schaüble, junto a la ministra francesa Christine Lagarde y el comisario europeo Olli Rehn.
Elena Salgado, en el centro, conversa con el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schaüble, junto a la ministra francesa Christine Lagarde y el comisario europeo Olli Rehn.REUTERS

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