_
_
_
_
_

Europa elige al gobernador del Banco de Portugal como nuevo vicepresidente del BCE

Vítor Constâncio sustuirá a Lucas Papademos, cuyo mandato expira en mayo.- Su elección despeja el camino al alemán Axel Weber, presidente del Bundesbank, para relevar a Jean-Claude Trichet al frente de la institución

Los ministros de Economía de la eurozona han elegido al gobernador del Banco de Portugal, Vítor Constâncio, como vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) en sustitución del griego Lucas Papademos, cuyo mandato expira en mayo, según informaron fuentes diplomáticas. Constâncio, que contaba con el apoyo de España, se ha impuesto a otros candidatos, el gobernador del Banco Central de Luxemburgo, Yves Mersch, y un director del Banco Nacional de Bélgica, Peter Praet. Su nombramiento debe ser todavía ratificado por la Eurocámara y por los jefes de Estado y de Gobierno de los 27 en la tradicional cumbre de primavera que se celebrará en Bruselas a finales de marzo.

Constâncio, un prestigioso economista portugués que ha ocupado destacados puestos en el partido de los socialistas portugueses, aparece como favorito, ya que cuenta con el apoyo de la mayoría de países. El puesto de vicepresidente es especialmente importante porque será el responsable dentro del banco de las nuevas instituciones que se creen para la supervisión financiera.

Más información
La UE decidirá medidas excepcionales para que Grecia aplique sus reformas
Bruselas quiere auditar las cuentas de los Estados para evitar engaños como el de Grecia
Grecia reconoce la magnitud del "desastre" pero se niega a tomar más medidas

La elección del portugués despeja el camino del alemán Axel Weber, presidente del Bundesbank, para convertirse en el próximo presidente del BCE en sustitución de Jean-Claude Trichet cuando el francés termine el mandato en octubre de 2011, según los analistas.

La candidatura de Weber gana puntos frente a la del otro aspirante, el italiano Mario Draghi, no sólo por una cuestión de equilibrio geográfico (sur-norte) sino también de equilibrio entre halcones (los que dan prioridad al control de la inflación, como el alemán) y palomas (que tienen más en cuenta el impacto de las decisiones de política monetaria en el crecimiento, como el portugués). Las posibilidades de Weber son muy elevadas, sobre todo por el interés de Alemania para ocupar este puesto, una vez superadas las reticencias iniciales hacia un alemán en la presidencia del BCE, sobre el que Berlín ha ejercido la influencia más notable.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_