La crisis económica congela las salidas a Bolsa en todo el mundo

El mercado primario está seco. El batacazo bursátil y el deterioro de las expectativas económicas tienen un impacto muy negativo en las salidas a Bolsa. En todo el mundo, durante el primer trimestre de 2009 sólo hubo 50 ofertas públicas de venta (OPV) que captaron 1.400 millones de dólares (1.055 millones de euros), según datos recopilados por Ernst & Young. La cifra supone una severa desaceleración frente al cuarto trimestre de 2008, en el que hubo 78 operaciones por un valor de 2.600 millones, y sobre todo frente al mismo periodo del año anterior cuando se culminaron 251 OPV que recaudaron 41.200 millones. Las cifras del primer trimestre de 2008 incluyen el estreno en Bolsa de Visa, el mayor de la historia en Wall Street.

Las tres mayores colocaciones del primer trimestre fueron la de la compañía de alimentación estadounidense Mead Johnson, el grupo minero chino Real Gold Mining y la empresa saudí Etihad Atheeb Telecommunication. Entre las tres captaron el 75% del dinero total. Por países, los más activos fueron Corea del Sur (ocho OPV), Japón (siete) y Polonia (seis). Las economías emergentes acapararon la mayoría de los estrenos (34 colocaciones).

En España el mercado primario sigue cerrado. El último estreno bursátil data del 23 de julio pasado cuanto la CAM realizó la primera emisión de cuotas participativas de una caja de ahorros. La salida a Bolsa de la entidad fue la única de 2008 después de que en los dos ejercicios anteriores el número de colocaciones viviese momentos álgidos. En 2007 empezaron a cotizar nueve compañías, entre ellas dos de las colocaciones más voluminosas de la Bolsa como Criteria e Iberdrola Renovables, y en 2006 debutaron otras nueve. La demanda de nuevo papel no está agotada para proyectos consolidados, como demuestra el éxito de las ampliaciones de capital de Gas Natural y Banco Santander o de la emisión de bonos de Telefónica e Iberdrola. Sin embargo, la aversión al riesgo sigue en máximos y los inversores necesitan que el escenario económico se despeje para volver a confiar su dinero a compañías que aspiran a dar el salto al mercado.