Experimentada en el sector aéreo
Texas Pacific Group (TPG) está considerada como una de las firmas de capital riesgo líder en el mundo. El fondo fue fundado en 1992 por David Bonderman y ahora gestiona más de 30.000 millones de dólares (22.488 millones de euros) en inversiones. Desde hace un par de años estos fondos se han interesado por el mercado europeo, en el que buscan empresas a punto de liquidar y con potencial para incrementar su valor.
TPG es, como sus rivales Blackstone, Carlyle, Kohlberg Kravis Roberts o Bain Capital, muy activa a la hora de inyectar capital en compañías endeudadas o con un pobre rendimiento bursátil. Su estrategia de inversión esta diseñada para aprovechar los momentos bajos en un sector o en una empresa, antes de que se produzcan cambios de tendencia y sacar tajada.
La firma tejana ha conseguido así participaciones destacadas en más de medio centenar de compañías, en una variedad de sectores, entre las que destacan Seagate Technologie o ON Semiconductor en el tecnológico, franquicias como la cadena de restaurantes Burger King o J. Crew en el sector comercial, además de los estudios MGM y el grupo de medios Univisión.
En el sector aéreo, TPG tiene inversiones en las estadounidenses Continental Airlines y America West (ahora US Airways), busca hacerse con el control de la australiana Qantas y está interesada también por Alitalia. Bonderman preside además la compañía de bajo coste irlandesa Ryanair, la de mayor éxito en Europa.
El sector de capital inversión (private equity) lleva movidos este año 144.700 millones, según datos de Bloomberg (400.000 millones en 2006). La operación más destacada la protagonizó TPG con su rival KKR, al adquirir la eléctrica estadounidense TXU, en una operación valorada en 45.000 millones de dólares, todo un récord.
