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Botín pide que continúen las reformas económicas

Íñigo de Barrón

Emilio Botín presentó ayer los resultados en la antigua sede madrileña del Banco Santander, el número 24 del paseo de la Castellana, un edificio particularmente apreciado por este banquero y que será el único que quede en propiedad del grupo cuando éste se traslade a Boadilla del Monte, donde tendrá su ciudad financiera.

"Hacemos aquí esta presentación porque ahora se cumplen 10 años de la compra de Banesto, que la presentamos Alfredo Sáenz y yo. Entonces el banco ganaba 363 millones de euros. Hoy, 2.611 millones". Es decir, siete veces más.

Botín basó su optimismo para 2004 en la buena evolución que está teniendo la economía española, "que crece más que el resto de Europa. Las reformas económicas de otros años han sido muy positivas y ésta debería ser la línea a seguir en el futuro", advirtió. Preguntado por su opinión por el programa económico del PSOE y las consecuencias que podría tener su aplicación si llega al poder, el primer banquero español se limitó a decir que "no quiero opinar porque estamos en periodo electoral. Si el pueblo español decide un cambio, en unas elecciones democráticas, será bueno para el país y para el Santander".

Pocos escándalos

Botín tampoco quiso opinar sobre la relación entre la llegada del Gobierno tripartito en Cataluña con la marcha de empresas radicadas en esta región. "No entro a juzgar a los Gobiernos", sentenció, pero recordó que "en economía hay que admitir que las empresas se vayan cuando encuentren costes más bajos".

En relación con el escándalo de Parmalat y otros recientemente ocurridos en Estados Unidos, el presidente del Santander advirtió del riesgo de que se produzca una "sobrerreacción" y se regule en exceso para tratar de poner freno a la aparición de nuevos escándalos financieros. "Los escándalos han sido importantes, pero son pocos. Los mercados deben juzgar el código de conducta de las empresas, pero que se legisle lo indispensable".

El Grupo Santander cuenta con una posición de riesgo de 87 millones de euros con Parmalat. Además, explicó Botín que la operativa que llevó a cabo la filial de Islas Caimán con Parmalat "se realizó hace dos años y fue explicada a las autoridades".

Preguntado sobre su futura jubilación, Botín recordó con sorna que los estatutos no fijan una edad de retirada del presidente ni de los consejeros. "Todo depende de las condiciones", y las de Botín todavía parecen buenas.

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Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

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