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La CNMC critica la equiparación del cigarrillo electrónico con el tabaco

El organismo lamenta que se mantenga la venta exclusiva en los estancos de los productos vinculados al tabaco y que los dispositivos de nicotina se incluyan en las farmacias

Un hombre fuma un cigarrillo electrónico.
Un hombre fuma un cigarrillo electrónico.gianluca battista

A la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) no le gusta que los estancos sigan teniendo en exclusiva la venta del tabaco. En su último informe, donde analiza el proyecto de real decreto para la regulación del tabaco, vuelve a criticar el sistema de monopolio. Pero además, aprovecha también para criticar la nueva normativa que regula también la venta del cigarrillo electrónico, que ha quedado reservada en el proyecto normativo a estancos, farmacias, parafarmacias y tiendas especializadas y se prohíbe la venta a distancia y en máquinas expendedoras.

"Siendo criticable la reserva de distribución en estancos (en la línea de la observación anterior), sorprende más aún la reserva en farmacias y parafarmacias en tanto en cuanto el enfoque de este Proyecto de Real Decreto es la consideración de los productos susceptibles de liberación de nicotina como producto relacionado con el tabaco (y no con carácter general como medicamento)", señala el organismo supervisor.

En un informe sobre el proyecto de Real Decreto por el que se regula la fabricación y venta de productos de tabaco, el organismo supervisor echa en falta un análisis amplio y comprensivo del conjunto de instrumentos de política pública en el sector del tabaco (política impositiva, medidas de oferta y demanda, campañas de información, etc.). Suscribe que a ello no ayuda, sino más bien lo contrario, la dispersión de órganos encargados de que se aplique la normativa.

Ventaja para las tabaqueras

El informe analiza con profundidad la regulación de los dispositivos susceptibles de liberación de nicotina (cigarrillos electrónicos) con los productos del tabaco. Además de poner dudas sobre la idoneidad de restringir su venta a determinados espacios, a su juicio, la equiparación de estos artículos con el tabaco puede suponer "una clara ventaja a las empresas tabaqueras, presentes ya en el sector del tabaco que cuentan, sin coste adicional, con la infraestructura exigida y el know how del negocio de un mercado análogo en regulación y estrategias comerciales".

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En ese sentido, recomienda “la evaluación de tales restricciones bajo la óptica de necesidad, proporcionalidad y mínima restricción competitiva así como la consideración de alternativas de intervención (como pudiera ser el aumento del gravamen a través de impuestos específicos)”.

Además de restricciones de venta, la normativa prevé imponer al cigarrillo electrónico las mismas prohibiciones de publicitarse que al tabaco. E incluso duda de si no habría que revisar las trabas al márketing del tabaco en general. "Si bien las restricciones a la publicidad y a la actividad promocional tienen su justificación en el fin de protección de la salud y prevención del tabaquismo, cabría replantearse la necesidad y proporcionalidad de algunas de ellas, previstas no solo en este PRD sino en el resto de la normativa sectorial. Cabría reconsiderar en especial aquellas restricciones que limitan la entrada de nuevos operadores y se traducen en un mantenimiento el statu quo de un sector de por si tan blindado a la competencia (por la propia regulación, estructura del sector, características del proceso productivo, etc.)", plantea.

Críticas al sistema de estancos

También destaca que la distribución y venta minorista de productos del tabaco se siguen reservando en exclusiva a determinados establecimientos (estancos y puntos de venta con recarga). "Si bien se trata de restricciones ya previstas en la normativa vigente, constituyen una restricción a la entrada de operadores y un blindaje a los operadores. Recomienda, en la línea de lo ya advertido previamente por esta CNMC, reconsiderar estas restricciones y, en especial, el mantenimiento del monopolio en la distribución minorista del tabaco dado la débil justificación con que cuenta", sostiene.

A su juicio, existen además, otros aspectos cuya regulación sería mejorable desde el punto de vista de la promoción de competencia y regulación económica eficiente. Por ejemplo, el amplio catálogo de restricciones a la competencia que, aunque derivan en buena medida de la normativa europea, constituyen barreras a la entrada de nuevos operadores. “Las restricciones no están debidamente justificadas en cuanto a su adecuación a los principios de regulación económica eficiente y mínima distorsión competitiva".

Justificar mejor la normativa

La CNMC recomienda eliminar la reserva y prohibiciones que prevé el proyecto, o en su caso, justificar de acuerdo con los principios de regulación económica eficiente la racionalidad de estas medidas. Por otra parte, propone "evaluar con arreglo a los principios de regulación económica eficiente el régimen y procedimiento de autorización de laboratorios participantes en la verificación y control de calidad, así como reforzar las garantías de no discriminación por razón de la nacionalidad de los laboratorios. Se considera conveniente además reforzar las garantías de independencia de los estudios exigidos a fabricantes e importadores".

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