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Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

El renminbi como moneda de referencia

El 30 de noviembre, el Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció su decisión de incluir la divisa china (renminbi, RMB) en la cesta de monedas de referencia, que determinan los derechos especiales de giro (o SDR, por sus siglas en inglés). Ha sido una decisión largamente esperada, pues el FMI ya había dado a entender su intención de incluir la moneda china, dado que cumple todos los requisitos técnicos de la entidad y a pesar de no satisfacer por completo uno de los criterios básicos de las divisas de reserva, el de plena convertibilidad. La medida de incluir el RMB beneficia de igual manera los intereses políticos y económicos del FMI y de China.

En la reciente crisis, el papel del FMI en el mundo emergente se ha visto en cierta forma mermado, a medida que los países con necesidades de financiación en divisa extranjera han ido dependiendo cada vez más de acuerdos bilaterales con otros bancos centrales, como la Reserva Federal de los EE UU para satisfacer sus necesidades de liquidez. Los SDR apenas constituyen un 2,8% del total de activos de reserva a nivel global. Sin embargo, con la inclusión del RMB en los SDR el FMI podría perseguir el fortalecimiento de su influencia, al menos sobre los mercados emergentes, ofreciendo una vía adicional de participación en el sistema financiero global.

La inclusión de la moneda china en la cesta del FMI será un incentivo para que las autoridades chinas impulsen la liberalización financiera

Para las autoridades chinas, la inclusión representa una victoria en el ámbito externo, al ser algo por lo que los dignatarios locales llevan luchando desde hace varios años. Además, la decisión del FMI podría servir para promocionar las medidas de flexibilización como un gran éxito a nivel doméstico, ayudando a las autoridades a obtener el reconocimiento del público en general, a la vez que generan capital político suficiente para impulsar otros elementos importantes en su agenda de reformas, como parte de su compromiso oficial con el Fondo y sus miembros. Por otra parte, la inclusión de RMB también forma parte de la gran campaña de promoción que China ha estado llevando a cabo para fomentar el uso en el exterior de la moneda.

Sin embargo, lo más probable es que el impacto sobre el uso del RMB en el exterior sea muy limitado a corto plazo, por dos motivos. En primer lugar, hasta el momento los bancos centrales más importantes se han resistido a mantener reservas de divisas en renminbi, debido a las restricciones de la cuenta de capitales china. Salvo que China decida abrir por completo su cuenta de capital, no resulta factible pensar que los bancos centrales de otros países cambien de idea y decidan mantener un mayor número de activos en RMB. Después de todo, las reservas de divisas de estas entidades tienen que ser muy líquidas para garantizar su venta en caso de emergencia. Por otra parte, China ya ha firmado un gran número de acuerdos bilaterales con otros bancos centrales, lo que, en cierta medida, reduciría la demanda efectiva de activos denominados en RMB como parte de sus reservas de divisas.

En definitiva, la inclusión del RMB será un incentivo para que las autoridades chinas impulsen la liberalización financiera. De ahí que la decisión sea más que meramente simbólica. Sin embargo, su impacto se materializará a largo plazo; en el corto plazo los efectos no serán tan evidentes.

Le Xia es economista jefe de la Unidad de Asia de BBVA Research.

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