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Los pequeños inversores piden más de 1.000 millones en acciones de AENA

La demanda minorista quintuplica la oferta y muchos particulares se quedarán sin títulos

Miguel Jiménez
Vista del interior del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
Vista del interior del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.CARLOS ROSILLO

Los pequeños inversores se han lanzado en tromba a solicitar acciones de AENA en la privatización. Las peticiones de compra registradas por los bancos colocadores superaron ayer ligeramente el listón de los 1.000 millones de euros, según fuentes financieras al tanto de la operación. Con ello, quintuplican el volumen de acciones destinadas al tramo minorista de la oferta pública de venta (OPV) por medio de la cual sale a Bolsa el gestor de los aeropuertos españoles.

La oferta inicial solo destina 3.818.182 acciones al tramo minorista, de los que una décima parte es para empleados de AENA. Quedan solo 3,43 millones de títulos a repartir entre los pequeños inversores en general que, al precio máximo minorista de 58 euros, equivalen a 199,3 millones de euros. La demanda ya quintuplica esa cifra pese a que aún es posible pedir acciones hoy y mañana.

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Eso supone que la mayor parte de las peticiones se quedarán sin atender. Solo será posible adjudicar 25 títulos (lo que implica una inversión máxima de 1.450 euros) a una parte de las peticiones (unas 140.000), empezando el reparto por orden alfabético a partir de la letra k. Enaire, accionista de AENA, y los bancos tienen la potestad de ampliar el tramo minorista, pero se inclinan por no hacerlo.

Fuerte demanda institucional

En el tramo institucional la sobredemanda es incluso superior. Algunas fuentes hablan de una demanda de más de 10 veces la oferta inicial, con buena parte de las peticiones en el entorno de los 55 euros, máximo de la banda indicativa inicial. En todo caso, matizan que la cuantificación de la demanda relevante depende del precio que se tome. Además, señalan que el cambio del rango de precios orientativo y, sobre todo, la posibilidad de que se amplíe el tramo institucional con acciones que inicialmente iban dirigidas a los inversores de referencia obligan a relativizar cualquier cifra de sobredemanda en ese tramo, en el que las peticiones no son firmes hasta el último momento.

Si el precio final fuese igual o superior a esos 55 euros en que se ha registrado abundante demanda en la primera fase de la colocación, los tres potenciales inversores del núcleo duro (Corporación Financiera Alba, Ferrovial y el fondo de inversión TCI) se quedarían sin poder comprar los paquetes que se les reservaron en la primera fase de la privatización. Esos inversores pueden solicitar acciones dentro del tramo institucional, pero ni han decidido hacerlo ni hay garantías de que se les adjudiquen todas las que soliciten, según las fuentes consultadas.

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Sobre la firma

Miguel Jiménez
Corresponsal jefe de EL PAÍS en Estados Unidos. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS, donde ha sido redactor jefe de Economía y Negocios, subdirector y director adjunto y en el diario económico Cinco Días, del que fue director.

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