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Air France evalúa las pérdidas de la huelga de pilotos en 500 millones

La compañía aumentará este año las capacidades de su línea de bajo coste Transavia en un 13,3%

Gabriela Cañas

La compañía aérea Air France ha anunciado esta mañana que la huelga que los pilotos mantuvieron entre el 15 y el 28 de septiembre le va a suponer a final de año un impacto negativo en sus cuentas de 500 millones de euros. Como la aerolínea advirtió desde el principio, la protesta, que dejó en tierra durante dos semanas más de la mitad de los vuelos previstos, pone en serias dificultades las cuentas de la empresa, que ya atravesaba una compleja situación financiera con una deuda acumulada de 5.400 millones de euros.

La huelga, siempre según datos de la compañía, se han traducido en una caída del 15,9% del tráfico de pasajeros y de 17,7% del tráfico de cargo de la empresa matriz franco-holandesa Air France-KLM en septiembre. El coste de la huelga se evalúa en entre 320 y 350 millones de euros durante el tercer trimestre del año, a lo que hay que añadir la reducción de reservas para el cuarto trimestre, debido en parte al paro realizado por los pilotos, que está teniendo un impacto negativo en la demanda. De ahí la evaluación de alrededor de 500 millones del total durante el ejercicio 2014.

Este tropiezo en la segunda parte del año frenará sus expectativas, ampliamente mejoradas para este año antes de la huelga, si bien la compañía anuncia hoy al mismo tiempo el rápido desarrollo de su firma de bajo coste Transavia. Durante el mes de septiembre, el número de pasajeros transportados aumentó en un 10,2% y acumula un crecimiento durante el año de un 9,7%. Transavia France verá durante la próxima temporada 2014-2015 que empieza en octubre aumentadas sus capacidades en un 13,3%.

Debido a la huelga de pilotos de Air France (que, por cierto, ha generado cierto malestar en la holandesa KLM), la compañía ha descartado su proyecto de desarrollar Transavia Europe. Los huelguistas rechazaban la deslocalización que suponía establecer filiales en otros países europeos con condicionles laborales locales. Su demanda sigue siendo que todos los pilotos del grupo, incluidos los que trabajan para la compañía low-cost, dispongan de un contrato único, similar al que rige en Air France, mucho más ventajoso. No ha habido acuerdo y las negociaciones está, de momento, bloqueadas, pero la empresa ya ha anunciado que al menos seguirá adelante con Transavia France, aumentando su dotación y con salarios adecuados al sistema low-cost.

 

 

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Sobre la firma

Gabriela Cañas
Llegó a EL PAIS en 1981 y ha sido jefa de Madrid y Sociedad y corresponsal en Bruselas y París. Ha presidido la Agencia EFE entre 2020 y 2023. El periodismo y la igualdad son sus prioridades.

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