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Los hoteleros de Baleares pactan el convenio al renunciar a externalizar

El pacto laboral, que influye en todo el sector turístico, afectará a unos 80.000 trabajadores de las islas

Piscina del hotel Luabay Galatzó, en Peguera, Mallorca ( Baleares)
Piscina del hotel Luabay Galatzó, en Peguera, Mallorca ( Baleares)

El modelo laboral del negocio hotelero no cambiará, de momento, en Baleares, comunidad clave en el sector del turismo en España. Los empresarios y los sindicatos UGT y CC OO cerraron anoche el articulado del nuevo convenio laboral de la hostelería en las islas. El pacto comenzó a negociarse seis meses atrás y encalló a lo largo del mes de mayo, cuando se cernió la amenaza de una posible huelga. El pactismo tradicional se impuso: no habrá externalizaciones de trabajadores ni se modificará el régimen de fijos discontinuos. La patronal pretendió fijar una congelación de salarios durante cuatro años de vigencia. Habrá un aumento de 4,5 puntos en cuatro años, 1,125 anual.

Los empresarios retiraron este miércoles, su propuesta estrella —la más problemática para los sindicatos— que buscaba consagrar una vía para poder externalizar servicios, por oficios, en los hoteles, con contratos a trabajadores ajenos a la plantilla del complejo y al convenio del sector. Así los sindicatos evitan que empresas especializadas y con convenios propios contraten con hoteleros, por ejemplo, los servicios de camareras de piso, las plantillas de cocina, o comedores. Los sueldos que se cobran, en estos casos, son casi la mitad de los establecidos por convenio: en las camareras de piso, 800 euros cuando por convenio perciben 1.400

La patronal buscó cerrar una jornada de trabajo sería "flexible" o "irregular", con un tope máximo de 54 horas semanales. El horario de descanso se iba a cambiar de 12 a 10 horas y el régimen de libranzas ya no sería de dos días determinados.

Los empresarios efectuaron un primer gesto, al rebajar su plataforma de exigencias: retiraron i el plan que alteraba el régimen de trabajadores fijos discontinuos. Esta vía para temporeros es una conquista histórica que aseguró empleo, seguro de paro o subsidio, según los meses trabajados.

De los 124.000 empleados turísticos en Baleares registrados en agosto pasado, unos 50.000 eran fijos discontinuos y otros 35.000, fijos de plantilla. El resto eran eventuales y de sectores vinculados. Los sindicatos creen que hay un 10% de trabajo sumergido.

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