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Tres bodegas se conjuran para conquistar el mundo

Vid y Olivo Inversiones comercializará sus caldos en China y América

Rafael Poveda, en la bodega alicantina Salvador Poveda.
Rafael Poveda, en la bodega alicantina Salvador Poveda. Joaquín de Haro

El vino español se aprecia cada vez más en el mercado internacional. El problema en muchas ocasiones para las bodegas es poder acceder a los canales de comercialización y llegar al consumidor potencial en Estados Unidos o en China. Para lograrlo tres bodegas españolas, la alicantina Salvador Poveda, la riojana Rey Eneo y la valenciana Bodega Castell dels Sorells han hecho una alianza comercial y se han sumado al holdingVid y Olivo Inversiones.

“Con esta alianza intercambiamos clientes y abrimos nuevos mercados”, explica Rafael Poveda, quien agrega que no existe ninguna contrapartida económica en esta operación. Se trata de un acuerdo entre bodegas, que elaboran productos totalmente diferentes y que buscan llegar al mismo destinatario. “En unas semanas hemos recibido multitud de pedidos”, asegura Poveda, que prepara cajas de vinos con destino a California o a China.

Las bodegas se comprometen a no competir entre ellas y tienen cierta garantía de exclusividad. Es decir, en esta alianza no podrá participar otra bodega de La Rioja, ni de Alicante ni otro productor de cava y espumosos. “Y la idea es desarrollar vinos a la carta para satisfacer al cliente. Por ejemplo, para China estamos diseñando unas botellas diferentes”, explica el enólogo de Monòver, que también baraja la posibilidad de adaptar los caldos a los gustos y preferencias de los clientes americanos o asiáticos. Las tres bodegas españolas tienen una producción anual que roza los cinco millones de botellas de vino, de las que un 75% se destinan a la exportación.

Salvador Poveda, Rey Eneo y Bodega Castell dels Sorells unen sus destinos

Vid y Olivo se lanzó en 2012 a la conquista del mercado chino de la mano del brandi español, ya que los clientes buscaban alternativas al coñac francés en España. Uno de los propietarios de Vid y Olivo, Pedro Cáceres, nacido en La Línea, criado en Santa Pola (Alicante) y nacionalizado estadounidense, asumirá ahora la comercialización internacional de los productos de estas tres bodegas. Los vinos se eligieron siguiendo las uvas de la comarca alicantina de Vinalopó. El tinto se elabora con uva monastrell, los blancos macabeos con un poco de aguja, entre los que destaca ese riesling especial que Poveda vende en Alemania y en media Europa y el rosado monastrell con color fresa, vivo que nos da idea de su juventud y frescura. El legendario Fondillón de Poveda, declarado mejor vino de la Comunidad Valenciana en el año 2006, de sabor intensísimo y ligeramente dulce, con tonos a cacao, almendra y avellanas, podrá ahora estar en las mesas chinas.

Puestos a la obra se definió una estrategia centrada en ofrecer calidad contrastada y consistente y racionalizar el conjunto de marcas. Al porfolio definitivo se le infundió una inyección de vitalidad mediante el rediseño de las presentaciones y del perfil de los vinos combinando tradición y modernidad.

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