_
_
_
_
_

¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de elegir un fondo de inversión?

Las condiciones económicas, emocionales y del entorno afectan en la elección a la hora de invertir los ahorros

El proceso de inversión de los ahorros debería suponer que el ahorrador elabore una estrategia en función de sus condiciones económicas, emocionales, del entorno y una táctica que le permita desarrollarla.

Una parte importante de esta táctica es el vehículo que utilizará para poder respetar el planteamiento inicial, y evidentemente los fondos de inversión pueden ser una buena alternativa.

Lo primero que se debe conocer es el concepto: se trata de un patrimonio sin personalidad jurídica que pertenece a un grupo de inversores (partícipes) que hacen aportaciones (compran participaciones). El fondo se encarga de comprar activos en función de una política de inversión predeterminada y ofrece un valor liquidativo diario (precio de los activos descontando las comisiones de gestión, depositaria y de operativa interna del fondo como corretajes de forma prorrateada). La ganancia/pérdida que obtiene el partícipe será por la diferencia del valor liquidativo de compra y el de venta, y siempre este resultado se aplicará de forma colectiva.

Los fondos tienen una serie de características propias que pueden suponer en algunos casos ventajas sustanciales respecto a productos alternativos:

- Diversificación:

Ya de por sí, y por Ley, un fondo debe estar diversificado, así que el inversor por el mero hecho de comprar participaciones ya está invirtiendo en varios activos.

En muchos casos las aportaciones mínimas necesarias para poder invertir en un fondo no existen o son mínimas, así que es muy fácil que una misma persona, con poco capital pueda al mismo tiempo diversificar entre activos de renta fija o variable, de diferentes políticas (conservador, retorno absoluto, arriesgado, mixto... ) de diferentes sectores (inmobiliario, telecomunicaciones, biotecnología, bancario...) de diferentes zonas geográficas o países concretos (Asia, Europa, Japón, EE. UU....) lo que a su vez puede influir en una diversificación también de divisa, aunque no necesariamente ya que en algunos casos hay fondos que ya ofrecen su rentabilidad con la divisa cubierta.

- Seguimiento:

La gestora debe notificar el valor liquidativo del fondo de forma diaria (en casos excepcionales podría ser semanal) así que el inversor puede hacer un seguimiento periódico de su cartera. Pero no solo eso, se publican gráficas actualizadas, rentabilidades anualizadas, globales, comparativa con otros con mismos índices de referencias...

- Trasparencia:

Las gestoras están obligadas a publicar folletos, informes trimestrales... explicando en qué pueden invertir, los riesgos que tiene, los índices de referencia con los que se pueden comparar, los activos más representativos, por no hablar de las auditorias a las que se someten.

- Liquidez:

Se pueden hacer operaciones de forma diaria, aunque las fechas de valoración pueden diferir en algún día dependiendo del tipo de operativa, gestoras...

Con estas condiciones, vía fondos no se pueden hacer operaciones con plazos inferiores a una semana y desde luego, para quien esté acostumbrado a la operativa en bolsa o ETF's donde la liquidez es intradiaria será un inconveniente, que tal vez se compense con otras ventajas.

- Fiscalidad:

En este caso se puede disfrutar de una utilidad única: los traspasos entre fondos (en la práctica vender uno para reinvertir en otro) realizados por personas físicas residentes, ya sea de diferentes gestoras, con diferentes políticas de inversión o de diferentes países no acarrea tributación alguna; es decir no se descuenta la retención del 21% ni afecta a la declaración de IRPF.

Puede pensarse que es un simple diferimiento ya que en el momento de rescatarlo sí hay que declarar todas las ganancias acumuladas desde el primer fondo, sin puede ser más que eso:

• Permite traspasar ganancias generadas en "menos de 1 año" (con penalización fiscal importante) a "más de 1 año".

• En principio, en 2015 podría haber una rebaja impositiva, así que se pueden conseguir rendimientos en 2014 y tributar en 2015 con unos tipos más bajos.

• La parte de ahorro fiscal, al quedar en el patrimonio, también capitaliza por lo tanto cuantos más traspasos se hagan más beneficio global tendrá el partícipe a la hora del rescate respecto a otro ahorrador que lo haya hecho por otras vías.

• Aunque suene insensible, es muy posible que en vida no se agoten los ahorros, por lo tanto, se podría dar el caso que nunca se tribute por algunas ganancias obtenidas siendo el tipo de Impuesto de Sucesiones mucho menos confiscatorio que el de IRPF.

Una vez analizados todos estos puntos, la persona que haya decidido que los fondos de inversión le permiten desarrollar su estrategia hay que elegir la cartera de fondos concreta en base a unos elementos:

- Comisiones:

Hay una serie de comisiones que se pueden aplicar en los fondos, con unos límites legales:

• Gestión: Límite 2,25% anual sobre el patrimonio

• Resultados: Límite 18% anual sobre el beneficio

• Combinación entre resultados y gestión: Límite 1,35% anual sobre el patrimonio por gestión y un 9% sobre los rendimientos

• Suscripción y reembolso: 5% conjunto por los dos conceptos sobre el valor liquidativo

Tal vez las más importantes sean las de suscripción y reembolso ya que pueden afectar significativamente en la operativa; sin embargo los de gestión al calcularse periodificados y descontarse en el cálculo del valor liquidativo se analizará al comparar rentabilidades.

- Aportaciones mínimas:

Por gestión de cartera y diversificación hay que evitar la inversión en fondos que exijan cantidades superiores a las óptimas, así que dependiendo del importe de la cartera habrá fondos a los que no se pueda optar, por bueno que sea.

- Rentabilidades pasadas:

Es cierta la frase "resultados pasados no garantizan resultados futuros", pero también lo es que analizando la evolución del fondo y comparándolo con otros se puede detectar en qué momentos y circunstancias hay más posibilidades de obtener beneficios y que gestores lo hacen históricamente mejor.

- Tipos de fondos y activos en los que invierte:

El tipo de fondo dependerá de tres circunstancias fundamentales:

1. Situación emocional del ahorrador: Hay tipos de fondos que pueden generar pérdidas, ya sean puntuales o definitivas, pero hay personas que psicológicamente no lo pueden soportar, y realmente la salud es más importante que el dinero.

Esto no significa que nunca se puedan elegir fondos agresivos (incluso algunos conservadores pueden dar pérdidas), pero si es el caso, se tendrá que hacer un esfuerzo en formación para entender los riesgos, volatilidades... y saber a ciencia cierta si se pueden asumir.

2. Situación económica: Dependiendo de las necesidades de liquidez, fuente de ingresos, estabilidad laboral se debe distribuir la cartera entre fondos muy conservadores (quasilíquidos) y más arriesgados.

3. Situación de los mercados: a pesar de ser personas que puedan asumir riesgos e invertir en fondos de renta variable, en momentos de mercados bajistas se puede optimizar la cartera buscando fondos refugio. Esta estrategia, necesita un seguimiento periódico para minimizar pérdidas y maximizar ganancias.

Luís García Langa, experto independiente de iAhorro.com

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_