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PESCA CABALLA

El Gobierno rechaza "presiones violentas" para repartir la pesca de caballa

El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, atiende a la prensa en el Parlamento Europeo. EFE/Archivo
El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, atiende a la prensa en el Parlamento Europeo. EFE/ArchivoEFE

El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, ha rechazado hoy el uso de "medios de presión violentos" y de "amenazas" empleados por una parte de la flota de Galicia, por su desacuerdo con el reparto de la cuota de pesca de caballa (verdel o xarda) y de jurel (chicharro).

Domínguez ha reaccionado así, en declaraciones a los medios de comunicación, a las protestas protagonizadas hoy en Vigo por parte de pescadores de cerco, que han provocado importantes retenciones y bloqueos en el centro de la ciudad.

A su juicio, el problema en la distribución de la caballa y el jurel es "un desacuerdo interno", dentro de los distintos segmentos de la flota de Galicia, y "no con la Secretaría General de Pesca".

No obstante, el Gobierno esta dispuesto a "negociar, contactar y dialogar" con toda la flota en su conjunto, pero no bajo "amenazas".

Ha detallado que, dentro de los pescadores gallegos, una parte quería un reparto individual de las cuotas, por barco, de acuerdo con las propuestas presentadas por la Secretaría General de Pesca en diciembre; y otra parte aboga por poner esos cupos "en conjunto, para explotarla y consumirla entre todos".

"Lo que no se puede hacer es utilizar medios de presión violentos para obligar a quien quiere una cuota individual a ponerla en común con los demás", ha indicado Domínguez.

Según ha remarcado "el reparto por provincias y por Comunidades Autónomas para la modalidad de cerco está cerrado y nadie ha puesto encima de la mesa un acuerdo que reúna mayor consenso que el que propusimos el 20 de diciembre; no tenemos nada que hacer".

En ese momento, los representantes del sector de Galicia, Asturias, Cantabria y del País Vasco aceptaron los porcentajes que les correspondían por autonomías.

Posteriormente, ha precisado, diez cerqueros asturianos mostraron su desacuerdo, pero Galicia "no puso en cuestión" ese reparto.

La Secretaría general de Pesca ha planteado que, una vez pactado el reparto, quedara la opción de que cada provincia o autonomía gestionara la cuota que le corresponde de manera individual o agrupando el cupo dentro de una asociación, provincia o comunidades autónomas.

No obstante, la Secretaría ha convocado a representantes de todo el sector de artes fijos o menores -distintos al cerco y arrastre- a una nueva reunión, que "creo que será la última, porque no tenemos más que discutir".

"Pondremos la propuesta más equitativa y justa, y esperamos que con eso se pueda empezar a pescar", ha añadido.

De esta forma, la pesquería de la caballa se abrirá cuando haya una normativa aprobada; y, para ello, el Gobierno ha pedido al sector que comunique sus preferencias en cuanto a la fecha.

En cualquier caso, ha añadido Domínguez, con el nuevo sistema de cuota individual por barco la importancia de la fecha de apertura del caladero baja "muchísimo", porque ahora todos los barcos no tendrán que consumir la misma cuota.

La "gran ventaja" es, para flotas como la de Galicia, que un barco no tendrá que ir a pescar su cupo de capturas a la desembocadura del río Bidasoa, al Golfo de Vizcaya, y podrá pescar la caballa o el jurel más cerca del litoral gallego.

La distribución de la caballa se basa en criterios como las capturas históricas, los tripulantes, la potencia del barco y requisitos socio-económicos, según Domínguez.

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