_
_
_
_
_

El Canal dice la negociación con la constructora española sigue con “mesura”

Los abogados de ambas partes continúan las discusiones Este miércoles se cumplen ocho días de la suspensión de los trabajos para expandir la vía

Vista panorámica de las obras de ampliación del Canal de Panamá.
Vista panorámica de las obras de ampliación del Canal de Panamá.Alejandro Bolivar (EFE)

Luego de más de 85 horas de silencio, la estatal Autoridad del Canal de Panamá (ACP) corrió ligeramente este martes el velo sobre las negociaciones con el Grupo Unidos por el Canal (GUPC) por el conflicto financiero que desde el pasado 5 de febrero mantiene paralizadas las obras de ampliación de la vía interoceánica. Las “conversaciones” bilaterales, anunció la ACP en un comunicado, “continúan” sobre una agenda de cinco puntos, con “mesura y mucha tranquilidad”, aunque este miércoles se cumplirán ocho días de la suspensión de los trabajos.

En un breve informe emitido este martes por la tarde, el primero que difunde sobre el conflicto desde el viernes pasado por la noche, la ACP reveló que “durante el día las partes se comunicaron vía llamada en conferencia para plantear sus posiciones. Los abogados de ambas partas continuarán las discusiones de las posiciones respectivas”.

“Seguimos abiertos a todas las opciones contempladas en el contrato, dando cada paso con mesura y mucha tranquilidad”, afirmó el panameño Jorge Quijano, administrar de la ACP, en una declaración incluida en el comunicado. Con una oferta de 3.118 millones de dólares, GUPC se ganó en 2009 una licitación para construir las esclusas y ese mismo año firmó el contrato con ACP e inició los trabajos para edificar lo que es el trecho principal de la ampliación, presupuestada en 5.250 millones de dólares e iniciada en 2007.

“Los fundamentos de la posición de la ACP se mantienen iguales. Tan pronto lleguemos a una u otra decisión, lo informaremos de inmediato”, añadió Quijano.

El Grupo—comandado por la española Sacyr Vallehermoso y la italiana Impregilo—ha conducido las negociaciones desde Madrid, Roma y su base de operaciones en Panamá, donde permanecen sus ejecutivos destacados en el proyecto panameño para construir un juego de esclusas en los litorales del Atlántico y del Pacífico que expandirá la vía abierta en 1914.

GUPC anunció el 1 de enero pasado que si no se le pagan 1.600 millones de dólares por gastos adiciones o sobrecostos imprevistos, el 20 de enero suspendería las obras para construir las esclusas de la ampliación. La ACP rechazó el reclamo y exigió dirimirlo bajo los términos del contrato de 2009.

Pese a que el plazo del 20 de enero se cumplió sin acuerdo, ACP y GUPC acordaron seguir negociando con un límite al 31 del mes anterior que luego corrieron al 4 de febrero. Las pláticas bilaterales concluyeron la noche del 4 de febrero sin arreglo y, al día siguiente, el Grupo cumplió su amenaza y suspendió la construcción de las esclusas.

Según el nuevo boletín, “las discusiones se basan en la contrapropuesta presentada a GUPC por la ACP la semana pasada”. “Actualmente”, informó, las negociaciones “se centran” en los siguiente puntos: la reanudación de la obra, la fecha de entrega de todas las compuertas, la formulación del cronograma de ejecución actualizado, los aportes financieros de todas las partes y la extensión de la moratoria de repago.

En su contrapropuesta del pasado viernes, la ACP sugirió al consorcio un financiamiento compartido para “viabilizar” que “a la brevedad posible” se reanuden las obras. La propuesta establece fechas específicas para que el Grupo entregue las compuertas y termine los trabajos.

El repago asciende a 748 millones de dólares que la Autoridad ha adelanto al conglomerado en diversas fases del proceso. La ACP extendería el plazo de repago de los avances, si GUPC cumple “con las fechas de entrega exigidas”, puntualizó.

El conglomerado constructor—integrado también por la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana como minoritarias—se comprometió en 2009 a finalizar en 2014, aunque en 2012 emergieron retrasos y se postergó a junio de 2015. A pesar de la incertidumbre sobre el futuro de la ampliación, Quijano ha dicho que estará lista en 2015, “con o sin” el Grupo.

En un ir y venir de ofertas, la ACP explicó el viernes anterior que su contrapropuesta de ese día “permite viabilizar la continuación del proyecto”. Sujeta a revisión de ambos lados, “la propuesta no aumenta el precio contratado (de 3.118 millones de dólares) ni la aceptación de reclamaciones algunas, las cuales deben seguir el proceso del Contrato; también se fundamenta en que las partes aportarían recursos financieros para que se reinicien los trabajos a la brevedad posible”, aseveró.

La cuestión de las compuertas es clave. La ACP ha solicitado que cuatro compuertas que están listas en Italia para ser embarcadas sean traídas pronto a Panamá. De las 16, hay otras cuatro próximas a terminarse, con dos más en construcción, dos por construir y cuatro en suelo panameño.

Con las nuevas esclusas del Canal, construido de 1904 a 1914 por Estados Unidos, buques de mayor tamaño podrán transitar en ambas direcciones.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_