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Martinsa deja sin pagar 30 millones a sus acreedores

La inmobiliaria asegura que el convenio sigue siendo válido, ya que preveía un incumplimiento

La empresa Martinsa Fadesa ha encendido este lunes una luz de aviso sobre los riesgos de una eventual salida en falso del fiasco del ladrillo y los problemas que conllevará dejar atrás la crisis. La inmobiliaria ha advertido de que no podrá cumplir con el tercer pago anual de deuda a sus acreedores, tal y como estaba previsto en el convenio con el que logró emerger en 2011 del que fuese en su día el mayor concurso de acreedores de la historia, según ha informado la compañía a la CNMV.

La compañía que controla y preside Fernando Martín tenía que haber pagado a sus acreedores deudas por un importe de unos 30 millones de euros el pasado 31 de diciembre de 2013, según lo establecido en el plan de pago de pasivo con que logró salir del concurso. Pero no ha podido reunir el dinero para ello.

Pese a ello, Martinsa matiza a la CNMV que el impago de una anualidad del convenio "no supone el incumplimiento del mismo". A este respecto, fuentes de la compañía ratificaron que el convenio de pago de deuda que Martina pactó con sus acreedores ya contemplaba la posibilidad de que alguna de las anualidades no se pudiera abonar. En concreto, la inmobiliaria se acogió a la cláusula 3.4 del acuerdo.

Deuda de 7.200 millones

El 11 de marzo de 2011, el juzgado gallego aprobó el plan de Martinsa Fadesa para pagar sus 7.200 millones de deuda en un plazo de hasta 10 años, con lo que la inmobiliaria gallega superó oficialmente el concurso de acreedores al que se acogió el 15 de julio de 2008, el mayor de la historia de España.

La inmobiliaria presidida por Fernando Martín logró entonces que el plan de pagos y de viabilidad, elaborado por su banca acreedora, fuese respaldado por el 73,69% de las deudas con derecho a voto, muy por encima del 50 % exigido legalmente. Entre los acreedores que rechazaban el convenio figuraba el banco japonés Shinsei Bank, la entidad JER Valencia y un grupo de medio centenar de perjudicados de Arganda del Rey (Madrid), junto con el Ayuntamiento de la localidad.

Saldo negativo

Según constaba en el informe anual de gobierno corporativo de la inmobiliaria remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Martinsa Fadesa mantenía un cash flow para 2013 que arrojaba un saldo negativo de la tesorería por 16 millones (sin considerar financiación adicional). Por eso y dado que su capacidad para atender los pagos de la deuda estaba condicionada al valor de los activos y a su venta, ya advertía en su informe que las condiciones del mercado podrían afectar de forma negativa al cumplimiento de sus compromisos.

La inmobiliaria perdió 322,8 millones de euros en los nueve primeros meses del año, el 5,3% menos que los números rojos registrados en el mismo periodo de 2012 gracias a la disminución de los gastos de explotación en un 7% y las menores provisiones por depreciación de activos, un 32% inferiores. El resultado bruto de explotación (ebitda) multiplicó por casi tres su resultado negativo hasta los 33,4 millones.

En el periodo, la sociedad dominante mantenía un patrimonio neto negativo, una circunstancia que se veía corregida por la aplicación del Real Decreto Ley 10/2008, por los préstamos participativos vigentes, así como por los créditos convertibles en participativos, cuya autorización ya ha sido confirmada por los acreedores, ha explicado.

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