China y Estados Unidos arrancan en Pekín su 24 cumbre bilateral de comercio
China y Estados Unidos comenzaron hoy en Pekín su vigésima cuarta cumbre bilateral de comercio, en la que esperan limar las fricciones con respecto a las acusaciones recíprocas de proteccionismo sobre ciertos productos e impulsar un "nuevo modelo de relación entre superpotencias".
Así lo aseguró hoy el viceprimer ministro chino, Wang Yang, que copreside la cumbre junto a la secretaria de Comercio de Estados Unidos, Penny Pritzker, y de la que también forman parte el secretario de Agricultura, Tom Vilsack, y el representante de Comercio Exterior, Michael Froman, del país norteamericano.
Cuando se cumple el trigésimo aniversario de la comisión conjunta de comercio (inaugurada en 1983), destinada a promover las relaciones económicas bilaterales y tratar los desacuerdos comerciales, Wang aseguró que el comercio bilateral ha pasado de 4.000 millones de dólares registrados en 1983 a los 50 billones alcanzados este año.
Asimismo, dijo que la comisión "ayuda a construir una base sólida para un nuevo modelo de relaciones entre las superpotencias, que fue acordado por los presidentes de ambos países (Xi Jinping y Barack Obama) durante su encuentro en junio en California".
"Tenemos aquí hoy el potencial de demostrar a nuestros dos países la capacidad de eliminar las barreras comerciales y de inversión, aumentar la apertura y la eficiencia de nuestros mercados y asegurar que la relación se mueve hacia delante", dijo por su parte el representante de Comercio Exterior de EE.UU, Michael Froman, en la sesión de apertura.
Pritzker añadió que "el Gobierno y los líderes de EE.UU. y el resto del mundo han expresado cómo la comisión debería jugar un importante rol en apoyar el crecimiento común y la prosperidad entre las dos principales economías del mundo".
"Como exempresario, creo firmemente que, a través de una cooperación cercana, podemos y debemos lograr beneficios mutuos y resultados tangibles", añadió.
Pese a que la reunión se celebra en un momento de relativa tranquilidad en los lazos comerciales, favorecida por la revalorización del yuan con respecto al dólar (de un 16 por ciento en los últimos cinco años), hay varios asuntos delicados en las conversaciones.
El primer ministro chino, Li Keqiang, ya pidió ayer a Estados Unidos que relaje las limitaciones a la exportación de alta tecnología estadounidense a China, en un encuentro con una delegación norteamericana con Pritzker en la víspera de la cumbre.
Por su parte, EE.UU. espera en esta reunión presionar para que China aplique un mayor control contra las violaciones de los derechos de propiedad intelectual, dé mayor acceso para su mercado a los bienes y servicios estadounidenses y elimine algunas barreras reglamentarias.
En paralelo al inicio de la cumbre, China anunció este viernes el rechazo de doce remesas de maíz (un total de 545.000 toneladas) procedentes de Estados Unidos al no superar el control de calidad del Ministerio de Agricultura, que encontró exceso de la sustancia MIR162, un componente insecticida.
