Maestros colombianos se rebelan contra el acuerdo de sus líderes con el Gobierno
Los profesores los colegios públicos de Bogotá se rebelaron hoy contra el acta de compromiso firmada por el Gobierno con la Federación Nacional de Trabajadores de la Educación (Fecode) para desconvocar una huelga iniciada el martes porque consideran que el acuerdo no responde a sus demandas.
En rechazo al acuerdo, miles de educadores participaron hoy en una marcha por la Carrera Séptima de Bogotá, durante la cual denunciaron que fueron "vendidos" por el sindicato que los representa.
"Fecode nos vendió, lo que hizo fue una trata de docentes", dijo a Efe una profesora participante en la marcha, que avanzó de manera pacífica hacia el centro de la ciudad.
Coreando "Al maestro no lo jode ni el Gobierno ni Fecode", los profesores afirmaron que el pacto de sus dirigentes el martes con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, sobre el pago de primas y otros beneficios atrasados no corresponde con lo que realmente se les adeuda.
Gracias a ese acuerdo, Santos anunció la suspensión de la huelga indefinida en la que participaron el martes más de 300.000 educadores de todo el país, decisión que los maestros de Bogotá consideraron hoy "precipitada" por parte de sus dirigentes.
"Habíamos decidido que el paro sería de por lo menos tres días y anoche (martes) a las diez nos anunciaron que estaba suspendido. Nuestra decisión es la de seguir en paro", declaró otro manifestante.
Según los participantes en la marcha, en el acuerdo tampoco se concretó nada sobre sus demandas de una mejor atención médica, por lo que hoy se dirigieron a la sede de Fecode para protestar.
"Vamos a pedir la revocatoria de los directivos de Fecode porque no estamos de acuerdo con lo que ellos firmaron con el Gobierno", dijo a Efe otra profesora.
Los educadores denunciaron que las empresas de salud del país "se están enriqueciendo" con lo que les paga el magisterio y el servicio que le dan a los profesores es pésimo, situación que fue reconocida por la ministra de Educación, María Fernanda Campo, quien prometió soluciones a este problema.
