El Tesoro paga los mayores intereses del año para colocar 3.074 millones en letras

Los vaivenes de los mercados financieros, sin una guía clara desde que la Reserva Federal diera la señal de que va a tocar el freno en sus masivas inyecciones de liquidez, han influido también en la última subasta de deuda pública de junio. El Tesoro ha tenido que pagar los mayores intereses del año para colocar algo más de 3.074 millones en letras a tres y nueve meses.

Hace apenas dos meses, el Estado español se beneficiaba de la mejoría de los mercados hasta el punto de que colocó letras a tres meses al 0,15%, el menor tipo de interés marginal del que se tiene referencia en las estadísticas del Tesoro. Ahora ha colocado 934 millones de euros al 0,9%, una diferencia sustancial, casi el triple que en la subasta de mayor,  pero todavía en niveles muy inferiores a los de 2012 (1,3% de promedio) cuando las dudas sobre la continuidad de la zona euro gravitaron sobre las emisiones de deuda pública durante buena parte del año.

El Tesoro llegó a pagar el 2,65% por colocar letras a tres meses en julio de 2012, justo antes de que Mario Draghi, el presidente del Banco Central Europeo, mostrara su compromiso de ayudar con compras de títulos en los mercados secundarios a los países en problemas como España o Italia.

Las letras a nueve meses, un plazo que el Tesoro ha estrenado este ejercicio, también se tuvieron que emitir al mayor tipo del año, un 1,49%, casi el doble que en la subasta de mayo. En este caso se colocaron 2.140 millones de euros.

La subasta ha superado el rango más alto que se había planteado el Tesoro (3.000 millones de euros), con un nivel de demanda todavía elevado, con 2,6 peticiones de compra sobre lo ofertado por el Estado español, aunque inferior a la experimentada en la última subasta en el tramo de tres meses (2,9 veces frente a 4,3 en mayo).

Con esta subasta, el Tesoro completa su calendario de emisiones en la primera mitad del año, en la que ha aprovechado la mejora de las condiciones en los mercados para adelantar buena parte de sus operaciones, de modo que ya tiene cubiertas el 65% de las necesidades financieras previstas para 2012.