Sousa vació de negocio a Pescanova al pasar su actividad a otras empresas
Cambió actividades y personal de Cofrio, ventas de langostino de Mozambique, y de calamar y merluza en Malvinas
El presidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, vació de actividad económica a la sociedad matriz al traspasar a otras empresas su negocio (la actividad de Cofrio, ventas de langostino de Mozambique, y de calamar y merluza en Malvinas) antes de la llegada de la administración concursal. Según fuentes conocedoras de esta situación, esta operación supuso también un traspaso de trabajadores de Pescanova, sociedad que ha pasado a contar con unos 50 empleados, frente a los 110 anteriores.
El negocio de Cofrio, consistía en la venta de productos congelados de pescado y marisco destinado a los profesionales de la hostelería. Las actividades de la compañía en Mozambique y Malvinas, relacionadas con las ventas de langostino, calamar y merluza, también se traspasaron a otras empresas cuando Manuel Fernández De Sousa aún mantenía las facultades de gestión y administración del patrimonio de Pescanova.
Precisamente, el traspaso de estos negocios de Pescanova a otras empresas preocupa a los trabajadores de la firma, quienes han preguntado a la administración concursal por el futuro de esta sociedad, ya que sus ingresos han quedado comprometidos.
Cuando el juzgado de Pontevedra declaró en concurso de acreedores a Pescanova, a finales de abril, también retiró a De Sousa los poderes de gestión y administración en la compañía y pidió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que nombrara un auditor.
La CNMV propuso a Deloitte como administradora concursal de Pescanova, quien ha procedido a retirar a De Sousa, tras su petición del pasado viernes, de todas las filiales en las que figuraba como administración concursal.
