"+Universidad -Especulación", la fórmula para potenciar al emprendedor
El exrector de la Universidad de Santiago de Compostela Senén Barro ha descubierto la fórmula para conseguir potenciar el emprendimiento entre los jóvenes: "+Universidad -Especulación", y con ella titula un libro en el que reflexiona sobre la necesidad de estimular educativa y socialmente al emprendedor.
"Se ha disculpado y permitido la convivencia con la especulación en todos los sentidos", incluso en las propias universidades al ser estas reflejo vivo de la sociedad, ha criticado Barro (A Coruña, 1962) en una entrevista a Efe.
Catedrático de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial y rector en Santiago de Compostela desde 2002 a 2010, Senén Barro reconoce que ha tardado un año en escribir la obra pero en la misma recoge los pensamientos de mucho más tiempo, en el que ha constatado que la especulación "también ha llegado a la universidad".
La frase "El capitalismo se equivocó al primar al especulador sobre el emprendedor", del premio Nobel de Economía Robert Solow, le ha servido asimismo de inspiración para denunciar en su libro (editorial Netbiblo) que "no se ha estimulado socialmente a las personas emprendedoras".
"La clave indiscutible y definitiva y que no se está siguiendo para potenciar el emprendimiento es la educación", ha dicho este exrector, que cree que el modelo educativo actual que se sigue en las escuelas y en las facultades "consolida esa carencia".
"Nuestro modelo no educa para emprender", según Barro, que desea que los alumnos, además de ser formados en una educación cognitiva basada en "memorización y reproducción" lo sean en "inteligencia ejecutiva", es decir, "para emprender, atreverse a actuar y fijar sus propios objetivos".
Barro, que es presidente de la red de universidades iberoamericanas RedEmprendia, ha considerado "una obligación" que la universidad dé importancia a la empresa, no la vea como "una amenaza", y que se produzca una reforma "en profundidad" del sistema de gobierno o gobernanza.
"No es tanto cómo se eligen los rectores sino los instrumentos que puedan tener a su alcance para luego gobernar"; así, ha pedido que los rectores puedan preservar su autonomía frente a intereses corporativos, económicos externos y políticos.
Y ha asegurado que no se podrán mejorar sustancialmente las facultades, aunque ahora contemos con la mejor universidad de nuestra historia, si no se capta y contrata con flexibilidad al profesorado, cuyo régimen, dictado en 1985, ha calificado de "hiperregulado" y "claramente desfasado".
Una facultad "es lo buena que sea su personal", singularmente su Personal Docente Investigador (PDI), y por ello se debe conseguir un mecanismo adecuado y ágil que permita contratar ese talento "sin limitaciones", ha opinado.
En cuanto a la rendición de cuentas, Barro ha afirmado que "una cosa es rendir y otra tener rendimiento", y que no le gusta hablar de "total transparencia" si luego hay "unos pobres resultados con los recursos manejados".
Sobre los recortes que la crisis económica ha provocado, Barro, a pesar de ser "optimista por naturaleza", cree que no se deberían haber aplicado a la educación o a la investigación porque son parcelas "absolutamente claves para la sociedad a medio y largo plazo".
Por último, ha destacado que pasar de una universidad mediocre a una buena y a una excelente no ocurre "de un día para otro" y que a veces se cae en "ciertas urgencias sin sentido".
Pilar R. Veiga.
