La defensa de los servicios públicos de calidad se manifiesta en Pamplona
Una concurrida manifestación, convocada por todos los sindicatos del sector en Navarra ha defendido hoy en Pamplona "los servicios públicos de calidad" y ha rechazado la política de recortes que practican los gobiernos navarro y estatal y sus repercusiones en la ciudadanía.
La marcha, "En defensa de los servicios públicos de calidad", ha sido convocada por CCOO, ELA, UGT, LAB, Afapna, Anpe, APF, CISF, ESK, SAE, SATSE, SMN, Solidari, SPA, STEE-EILAS y USO, con el apoyo de partidos políticos, como PSN, Aralar, Batzarre, Bildu, Geroa Bai, Izquierda-Ezkera, PCE-EPK, y diferentes organizaciones sociales.
La iniciativa, secundada por 18.000 personas según los sindicatos y por 8.000 según la Policía Municipal, ha recorrido las calles del Ensanche y del Casco Viejo de Pamplona con diversas pancartas que reclamaban mejoras en los ámbitos de la educación, la sanidad y otros servicios, así como con críticas y la petición de dimisión de la presidenta, Yolanda Barcina.
Estos lemas han sido también constantes en los gritos de los manifestantes, que han proferido una sonora pitada al paso por la sede de UPN, en la plaza Príncipe de Viana.
Al término de la marcha, en la Plaza del Castillo, se ha leído un manifiesto conjunto en el que se ha dado cuenta de que el Gobierno de Navarra "acelera el desmantelamiento de los servicios públicos con la reciente destrucción de más de 2.300 puestos de trabajo", recortes que están afectando "negativamente a las condiciones de vida de la ciudadanía".
El aumento de las listas de espera sanitarias, el empeoramiento de la alimentación en los hospitales públicos tras la privatización del servicio, el deterioro del sistema educativo, el recorte en las ayudas a la dependencia o el avance de la exclusión social son algunas de las alarmas que han citado.
Por ello, los sindicatos convocantes han llamado a la sociedad "a plantarse ante la invasión de las competencias propias de Navarra y a reivindicar tomar aquí las decisiones que afectan a nuestros servicios públicos".
"Rechazamos la conversión de os servicios púbicos en un negocio para empresas privadas, así como que el incremento de los ingresos se realice sobre vías como los impuestos indirectos, el incremento de los precios públicos, el copago o fórmulas similares, que recargan el coste en la ciudadanía", han subrayado.
Por el contrario, han defendido que precisamente en época de crisis los esfuerzos "deben centrarse" en la defensa de los servicios públicos, "porque las personas son y deben ser siempre lo primero, y para ello deben conservarse los derechos a unas prestaciones sociales propias de un estado de bienestar y a unas adecuadas condiciones de vida, además del derecho a un trabajo digno y a una vivienda digna".
