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Sanciones para reequilibrar la cadena alimentaria

La nueva ley exige que haya contratos por escrito entre los productores y los distribuidores

El ministro Miguel Arias Cañete.
El ministro Miguel Arias Cañete.ULY MARTÍN

El Ministerio de Agricultura considera que existen “desequilibrios en las relaciones comerciales entre los diferentes operadores” que participan en la cadena alimentaria. Según las cifras que presentado este viernes, en España hay 989.787 explotaciones para la producción y 29.334 empresas que conforman la industria pero solo cinco operadores de la distribución concentran el 40,3% de cuota de mercado. Para reequilibrar las relaciones entre unos y otros, y en acuerdo con el Ministerio de Economía, el Ejecutivo dio luz verde al anteproyecto de ley para la modificación de la cadena alimentaria.

Reequilibrar el mercado de la alimentación ha sido una de las demandas más importantes de toda la producción y de las pequeñas industrias en los últimos años para evitar posiciones de dominio. La iniciativa fue recibida positivamente en medios de las organizaciones agrarias, aunque se considera que ahora lo importante es que se lleve a cabo. Desde la Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas se insiste en la necesidad de que la gran distribución cumpla con el contenido de las disposiciones en vigor y que se apliquen las sanciones que se prometen a quien lo incumpla.

La ley contemplará un código de buenas prácticas de carácter voluntario y donde las partes podrán establecer un mecanismo de arbitraje para solventar sus diferencias

Entre otros puntos importantes, el anteproyecto contempla la exigencia de que todas las operaciones de venta de los productos se hagan bajo un contrato escrito, donde estén identificadas las partes, condiciones de la operación, precios, entregas, duración o su finalización. “Se prohíben determinadas prácticas comerciales, como modificaciones unilaterales de los contratos y los pagos comerciales no previstos”, señala Agricultura. La ley contemplará un código de buenas prácticas que será de carácter voluntario y donde las partes podrán establecer un mecanismo de arbitraje para solventar sus diferencias. Se creará un registro de entidades que se acojan a ese código y la Administración les ofrecerá un trato preferente para acceder a subvenciones o para utilizar ese compromiso como publicidad.

En la actualidad la industria denuncia que la gran distribución está aplicando márgenes elevados a las marcas de fabricante y muy bajos o nulos para sus propias marcas. Para evitarlo, se obligará además a la distribución a desarrollar una gestión de igualdad para las marcas propias y las de fabricante, evitando prácticas “que alteren la libre competencia”. Además, funcionará un Observatorio sobre la Cadena Alimentaria. Agricultura se reserva la capacidad de inspección y sanción y la ley contendrá finalmente una dura política de sanciones, algo hacia lo que la gran distribución mira con preocupación.

El Gobierno dio también luz verde este viernes al proyecto de ley de Fomento de la Integración Cooperativa, destinado a lograr que las cooperativas españolas se asocien, extiendan sus actividades y aumenten de tamaño para ganar competitividad.

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