El alza de la energía impulsa la subida de los precios industriales
El incremento en julio es del 2,6%. El dato acumula 32 meses de repuntes
Los precios industriales encadenan ya 32 meses al alza. En julio se incrementaron un 2,6% en comparación con el mismo periodo de 2011 y un 0,8% respecto al mes anterior, según ha informado este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE). El repunte se debe sobre todo al encarecimiento de la energía y de los bienes de consumo no duradero.
La energía subió un 7,5% en términos anuales, siete décimas más que en junio, debido a que el encarecimiento del refino de petróleo y de la producción de energía eléctrica ha sido mayor que en julio del año pasado. La energía fue el sector que más influyó también en el comportamiento mensual de los precios industriales, al elevar un 2,8% su tasa.
La subida de los bienes de consumo no duradero fue algo más moderada (1,8%), dos décimas más que en junio, impulsados por la fabricación de aceites y grasas vegetales y animales. Los bienes de consumo duradero, en cambio, mantuvieron su tasa anual en el 1,1%, mientras que en el resto de sectores se recortaron los precios.
Los bienes intermedios redujeron tres décimas su tasa anual, hasta el 0,4%, su nivel más bajo desde marzo de 2010, por el descenso de precios en la fabricación de productos básicos de hierro y en la producción de metales preciosos. Estas industrias presentaron en julio sus tasas anuales más bajas desde febrero de 2010 y octubre de 2009, respectivamente.
Por comunidades autónomas, las mayores tasas interanuales de los precios industriales se dieron en Baleares (+5,6%), Canarias (+4,9%) y Extremadura (+4,3%), mientras que las tasas más bajas correspondieron a Navarra (+1,2%), Cantabria (+1,4%) y Aragón (+1,6%).
Casi todas las regiones elevaron su tasa anual de precios industriales en julio. Los mayores incrementos se los apuntaron Castilla-La Mancha y Murcia, con alzas de nueve décimas, hasta situar sus tasas en el 4% y el 3,8%, respectivamente. Entre los descensos, el más significativo lo experimentó La Rioja, que redujo su tasa anual ocho décimas, hasta el 2,6%.
