La crisis de la zona euro golpea a las exportaciones de China
Las ventas al exterior crecen solo un 1% en julio
El comercio internacional chino se ha ralentizado por segundo mes consecutivo y ha despertado inquietud sobre el empeoramiento de la situación en la segunda economía del mundo debido al impacto de la crisis global. Las exportaciones crecieron un 1% en julio respecto a un año antes, hasta 176.900 millones de dólares (145.000 millones de euros), cuando en junio habían subido un 11,3%, según anunció este viernes la Administración General de Aduanas de China. Las importaciones aumentaron un 4,7%, hasta 151.800 millones de dólares, frente a un ascenso del 6,3% en junio, lo que apunta a una menor actividad también del consumo doméstico.
China, el mayor exportador del mundo, ha sufrido de lleno el impacto de la mala situación en las economías occidentales, a lo cual se ha sumado un mercado inmobiliario local perezoso y un aminoramiento de la demanda interna. Las cifras del comercio —peores de lo esperado— se unen a las de concesión de créditos nuevos, que se encuentran en su punto más bajo de los 10 últimos meses, y a los datos anunciados el jueves de la producción industrial, que sube al menor ritmo de los tres últimos años.
China, el mayor exportador del mundo, ha sufrido de lleno el impacto de la mala situación en las economías occidentales
La evolución de las exportaciones y los otros indicadores han hecho cuestionar a los expertos la fortaleza de lo que se esperaba que fuera un rebrote de la economía tras los datos trimestrales anunciados el mes pasado. El PIB (producto interior bruto) creció un 7,6% anual en el segundo trimestre, el valor más bajo desde el 6,6% registrado en el primer trimestre de 1999.
Algunos analistas creen que el banco central chino tomará medidas y relajará la política monetaria para impulsar la actividad. La suavización de la presión inflacionista deja espacio a las autoridades para actuar. La inflación alcanzó un récord del 6,5% en julio del año pasado, pero en el conjunto del primer semestre fue del 3,3% y en julio se ha situado en el 1,8%, bien por debajo del máximo del 4% fijado para todo el año.
Algunos analistas creen que el banco central chino tomará medidas y relajará la política monetaria para impulsar la actividad
Entre otras medidas, Pekín podría ordenar nuevas rebajas de los tipos de interés, algo que ya hizo en junio y julio. Desde diciembre, ha disminuido en tres ocasiones los requisitos de reservas que deben tener los bancos, con objeto de liberar una cifra estimada en 1,2 billones de yuanes (153.780 millones de euros) para nuevos créditos. Pero los nuevos préstamos solo han alcanzado 540.000 millones de yuanes (69.200 millones de euros) en julio, frente a los 690.000 millones de yuanes que se esperaba, un motivo potencial de gran preocupación, ya que los créditos son un motor clave para la actividad de las empresas.
El 1% de crecimiento de las exportaciones es el valor más bajo desde noviembre de 2009 si se exceptúa la caída registrada el pasado enero. Los envíos a la UE cayeron un 16,2% en julio, mientras que los destinados a EE UU subieron un 0,6%, cuando en junio habían subido un 10,6%.
