Santander logra plusvalías de 1.430 millones con la salida a Bolsa de su filial en Brasil

El Banco Santander ha cerrado con éxito la oferta pública por medio de la cual sale a Bolsa su filial brasileña. El banco ha comunicado esta madrugada que el precio definitivo de sus acciones se ha fijado en 23,5 reales por cada paquete de títulos, el punto medio de la banda orientativa prevista. Con ello, captará 14.100 millones de reales (4.760 millones al cambio actual), contando con la opción de suscripción concedida a favor de los bancos colocadores, y unas plusvalías de 1.430 millones. Está previsto que las acciones comiencen a cotizar hoy en Nueva York y mañana en São Paulo.

La salida a Bolsa de Banco Santander Brasil se ha convertido en la mayor operación del año, por delante de los 5.000 millones de euros que supuso la oferta de China State Construction Engineering este verano. El Santander ha aprovechado el enorme apetito que hay por activos brasileños. El país ha esquivado la recesión este año y volverá a crecer a buen ritmo el próximo. Los grandes descubrimientos de petróleo en sus aguas y la adjudicación de acontecimientos deportivos como los Mundiales de fútbol de 2014 o, el pasado viernes, los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro de 2016, han puesto de moda el país entre los inversores internacionales, hasta el punto de que se teme un excesivo flujo de capitales.

El precio fijado supone valorar Banco Santander Brasil en unos 34.150 millones de euros (o 35.000 millones si se ejercita la opción de los colocadores sobre el 2,32% adicional de capital, un un 1,95% tras la ampliación). La filial del Santander en Brasil se sitúa casi a la misma altura que el primer banco italiano (Intesa Sanpaolo) y bastante por encima del mayor banco alemán (Deutsche Bank) o de los principales de Francia (Société Générale y Credit Agricole). Santander Brasil, que dobló su tamaño con la compra de Banco Real como parte de la operación ABN Amro, representa ya más de un tercio del grupo, cuya capitalización ayer era de 91.098 millones de euros.

Al precio fijado en la oferta pública, el Santander ha calculado unas plusvalías de 1.430 millones de euros, que se destinarán a provisiones genéricas y le permitirán mejorar sus ratios de solvencia. En concreto, elevará en un 0,60% su -core capital-. En cuanto al resto del capital, el banco dedicará la mayor parte de los fondos captados a financiar un ambicioso plan de expansión en el país, que contempla la apertura de unas 600 oficinas.

Cada paquete de acciones colocado representará 55 ordinarias y 50 preferentes (estas últimas sin derecho a voto, pero con un dividendo mínimo asegurado). Los 525 millones de paquetes de la oferta inicial suponen un 16,21% del capital del Banco Santander Brasil o, lo que es lo mismo, un 13,95% del posterior a la oferta. Si se ejecuta la opción de los colocadores, el papel vendido representará el 15,6% del capital posterior a la ampliación. En total, contando con los minoritarios actuales, flotará en Bolsa en torno al 17,2%. Según el folleto, el Santander se compromete a vender acciones adicionales en un plazo de tres años, prorrogable por otros dos, para que se alcance el 25% de capital flotante que exige la normativa bursátil brasileña.