_
_
_
_
_

Londres quiere recortar las primas a los ejecutivos bancarios

El regulador financiero británico apoya un impuesto sobre transacciones financieras

La lucha contra las primas de los ejecutivos bancarios tiene un nuevo socio. Reino Unido se une a Francia y Alemania en su defensa de una regulación de las bonificaciones a los trabajadores de entidades financieras, las principales responsables de la crisis económica mundial.

Lord Adair Turner, presidente del organismo regulador de la City de Londres (el Wall Street británico), criticado, precisamente, por su postura condescendiente con las pagas a banqueros, ha expresado su apoyo a un nuevo impuesto a la banca a fin de evitar el pago de primas excesivas en el sector.

En declaraciones que publica la revista Prospect, Turner, presidente de la Autoridad de Servicios Financieros (FSA), calificó de "socialmente inútiles" muchas de las actividades desarrolladas por la banca a la vez que se preguntó si la City había crecido demasiado.

Más información
Alemania y Francia pedirán al G-20 regular los sueldos de los banqueros

Su propuesta de aplicar un impuesto a los millones de transacciones que se producen en la City serviría para reducir los ingresos de la banca y dejaría menos dinero disponible para el pago de primas millonarias, según explicó. Además, Turner apunta a que esos impuestos serían "una buena y sensata" fuente de ingresos con los que financiar bienes y servicios de utilidad social.

Hace unas semanas, la FSA, cuyas funciones podrían verse ampliamente recortadas si los conservadores llegan al poder, anunció la introducción de nuevas normas a partir de enero próximo por las que se exigirá distribuir las primas en un plazo de tres años en lugar de proceder a su pago inmediato para esperar a ver así los resultados de la gestión de los altos ejecutivos.

"La cuestión fundamental es la de si el nivel alcanzado por las pagas en los servicios financieros es consecuencia de una hipertrofia de ese sector derivada a su vez de una desregulación excesivamente simplista", señaló. "No es algo en lo que se hayan fijado ninguno de los políticos, pero creo que es un asunto importante de legítimo interés público", agregó lord Turner.

El presidente de la FSA rechazó, sin embargo, el plan propuesto por los conservadores de llevar a cabo una investigación de las eventuales prácticas anticompetitivas de los bancos porque en su opinión no serviría para hacer frente a las transacciones financieras globales.

Lord Turner también se ha opuesto a la idea de los liberales demócratas -segundo partido de la oposición- de separar las actividades de banca minorista de las de inversión, que encierran un riesgo mucho mayor.

El primero que propuso un impuesto a las transacciones financieras fue el economista estadounidense James Tobin a comienzos de los años setenta, pero ni Washington, ni Londres mostraron en su día interés por esa idea, apoyada en cambio por organizaciones no gubernamentales como ATTAC (Asociación para la Tasación de las Transacciones Financieras Especuativas).

La agenda de Cinco Días

Las citas económicas más importantes del día, con las claves y el contexto para entender su alcance.
RECÍBELO EN TU CORREO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_