Rechazo a la "autarquía" en las cajas

José Blanco recuperó ayer una frase pronunciada en la misma ciudad, Santiago, hace algo más de un año, cuando empezaba el debate sobre una fusión de las cajas a la que Caixanova se resistía. Dijo entonces que a Galicia "siempre le fue bien cuando miró al exterior", en alusión a alianzas fuera de Galicia. Ayer lo repitió, con el añadido de animar a "no mirarse el ombligo". Entre ambas afirmaciones ha mediado una fusión con Caixa Galicia que no parece entusiasmar al ministro de Fomento. "Lo que hay que hacer es preguntarse si el sistema gallego está en mejores condiciones de competir que hace un año", y si en ese tiempo "se ha ganado o perdido el tiempo". Aunque las respuestas quedaron en el aire, Blanco apenas ocultó su disgusto con el proyecto que alumbró Novacaixagalicia.

Sin citar a la Xunta, el ministro lamentó que se antepusiera "un pretendido sentido de la galleguidad a un análisis riguroso sobre la realidad financiera y la solvencia". Explicó que la regulación del sector emprendida por el Gobierno "no está pensada para las cajas de ahorro de Galicia", sino para "fortalecer el sistema financiero". "Los mercados no están pensando en el Rh, están pensando en la solvencia", dijo el ministro, que censuró los "empecinamientos autárquicos" sobre las cajas, que "tienen un resultado más bien estéril".

Amancio Ortega

Blanco evitó animar a ningún gran empresario a invertir en la caja gallega. Preguntado por un asistente al coloquio sobre la posibilidad concreta de que Amancio Ortega, creador de Inditex, participe en el proyecto, respondió: "Yo no animaría a nadie a que tome una decisión porque yo no soy el gestor de una entidad financiera y cada uno tendrá que ver dónde invierte y por qué invierte". "Hay algunos", añadió, "que recomendaron a otros de esos que ha citado, y creo que no les ha ido muy bien". Blanco también eludió pronunciarse sobre el modelo bancario escogido por la caja gallega, respaldado ayer nuevamente por Feijóo. El presidente de la Xunta aseguró que espera que "nadie obstaculice" que Galicia cuenta "con una caja capitalizada a través de un banco".

Blanco repasó, por otra parte, algunas de las infraestructuras de Galicia, para defender la coexistencia de tres aeropuertos, pero "no pensando en competir". De las autovías, dio prioridad a la del Cantábrico, que el año próximo estará terminada en su tramo gallego, seguida de la alternativa a la AP-9 entre Vigo y Pontevedra por el interior.