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La OCDE pronostica un crecimiento sostenido para este año pese al petróleo

La organización cree que en 2007 harán mella las subidas del crudo y de los tipos de interés

La economía mundial seguirá creciendo a lo largo de este año, pero perderá velocidad en 2007, cuando, además de la subida del precio del petróleo, acuse el impacto del aumento de los tipos de interés en el consumo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en su informe semestral sobre perspectivas económicas, revisa al alza el crecimiento del conjunto de sus 30 países miembros en 2006 para dejarlo en un 3,1%, y a la baja la previsión para 2007, que calcula en un 2,9%. La inflación, en cambio, se reducirá en dos décimas el año que viene para quedar en un 2%. La OCDE eleva una décima, hasta el 3,3%, la previsión de crecimiento de España, todavía por encima de la media de la zona euro.

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Los expertos de la OCDE consideran que las economías de los países miembros han demostrado una inesperada capacidad para asimilar el importante encarecimiento del petróleo -se encuentra en niveles récord- sin desarrollar presiones inflacionistas que hubieran afectado a la demanda y el consumo. El conjunto de los países de la OCDE crecerá un 3,1% este año, frente al 2,8% de 2005, según el informe semestral de la organización con sede en París. Pero las amenazas persisten, según advirtió su economista jefe, Jean-Philippe Cotis, ya que todo indica que los precios de la energía seguirán siendo muy altos, impulsados por la fuerte demanda de Asia.

Pese a todo, las tres grandes economías del mundo (EE UU, Europa y Japón) se aceleran. En la zona euro, la economía española seguirá creciendo por encima de la media de los 12 países que integran la moneda única. El producto interior bruto (PIB) de España aumentará un 3,3% en 2006, lo que eleva una décima la previsión de noviembre. Mientras, la OCDE ha reducido tres décimas, al 3%, su previsión para el año que viene. Se trata de un crecimiento todavía muy por encima del de la zona euro, que crecerá un 2,2% en 2006 y un 2,1% en 2007.

Estados Unidos crecerá un 3,6% en 2006, una décima más que en 2005, pero el año próximo bajará al 3,1%. Japón, por su parte, prosigue su recuperación y su PIB aumentará en un 2,8% este año y en un 2,2% en 2007.

La inflación se mantendrá relativamente a raya. En Estados Unidos los precios se situarán a finales de este año en el 3% y bajarán al 2,3% en 2007, según las previsiones del informe. En la zona euro, la inflación tomará la dirección opuesta: 1,6% este ejercicio y 2% en el próximo.

El economista jefe de lo que se conoce como el club de los países más desarrollados advirtió de que la persistencia de desequilibrios importantes -como podría ser el déficit comercial de Estados Unidos- podría frenar en seco el crecimiento mundial.

Pese a todo, el precio del crudo sigue siendo la gran variable. La OCDE ha realizado los cálculos en la hipótesis de que el barril de petróleo se estabilice en torno a los 70 dólares de media.

Numerosas amenazas

Además del petróleo, la OCDE señala otras amenazas. Los desequilibrios en las balanzas por cuenta corriente, señaló Cotis, han aumentado y tienden a seguir haciéndolo. El caso de España, cuyo déficit exterior aumentará hasta alcanzar cerca del 10% del PIB, es uno de los citados, junto con el de Estados Unidos, que supera el 7,5%, pero que en valores absolutos tiene dimensiones espectaculares. Por el contrario, Alemania tiene un superávit del 4,5%, y China y Japón disfrutarán en 2007 de un balance positivo de sus cuentas corrientes del 5,5 y el 6% del PIB, respectivamente. Desequilibrios "insostenibles a largo plazo", según Cotis.

España también está en la lista de los malos alumnos por lo que se refiere al constante aumento del precio de la vivienda, y en general del sector inmobiliario, aunque esta vez tiene la compañía de Estados Unidos, Francia e Irlanda. Sobre este fenómeno, Cotis considera que existe el riesgo de lo que denominó "un bajón" -que no es otra cosa que lo que se ha venido llamando la burbuja inmobiliaria- si el aumento del precio de la vivienda mantiene la misma curva y siguen subiendo los tipos de interés.

El economista jefe de la OCDE considera que, por el momento, el Banco Central Europeo no debe aumentar el precio del dinero, aunque no descarta que sea necesario si se incrementan las presiones inflacionistas de las materias primas, especialmente el petróleo. Por el contrario, la OCDE sí que le dice a la Reserva Federal (banco central estadounidense) que suba los tipos de interés, ya que existen importantes riesgos de inflación importada.

La presentación del informe coincidía con la reunión ministerial de la OCDE en París y con la virtual toma de posesión del nuevo secretario general, el mexicano Ángel Gurría, que el 1 de junio tomará el relevo del canadiense Donald Johnston. De Gurría se espera que abra esta organización, nacida en la posguerra europea en torno al plan Marshall, al mundo emergente de la globalización, lo que supone dar entrada a nuevos miembros que son actores principales de la economía mundial.

Gurría apuntó que desde hace años la OCDE mantiene importantes relaciones con países que no son socios, como China, Rusia, Suráfrica o Chile, y se mostró partidario de seguir con esa tendencia. Pero recordó que "lo primero" es que los países que deseen formar parte del club sigan las reglas de gestión que practica la OCDE, que no son otras que las de la economía de mercado. "La ampliación es un paso posterior", dijo.

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