Moragues solo confía en que el Gobierno facilite el pago de la deuda
El consejero asume la dificultad de recibir más ingresos y la no reforma del modelo
El consejero de Hacienda y Administración Pública, Juan Carlos Moragues, hizo ayer una lectura positiva del importante Consejo de Política Fiscal y Financiera que tuvo lugar el jueves. Pero conforme fue avanzando su comparecencia tras el pleno del Consell, esa lectura se abría a otras interpretaciones. El consejero destacó que la Generalitat ha recibido “con agrado” la reducción al 1% de los intereses del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), que comportará un ahorro de 400 millones de euros en gastos financieros al Consell entre 2014 y 2015. Aseguró que esta medida, anunciada por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, “no es otra cosa que una respuesta a la reivindicación de la Comunidad Valenciana”, cuyo gasto financiero representa un 1,2% de su PIB, alrededor de 1.200 millones al año.
También manifestó que el gobierno valenciano ha propuesto una rebaja de los intereses del Plan de Pago de Proveedores, si bien reconoció la mayor complejidad de esta negociación, porque los fondos no son aportados por el Tesoro, como en el caso del FLA, sino por “un pool bancario”.
Moragues subrayó, además, que la propuesta del Gobierno de prolongar de 10 a 20 años las liquidaciones negativas de los años 2008 y 2009 supondrá “un beneficio de liquidez”. “Si tenemos que restar 221 millones en 2015 por esta liquidación, ayer [por el jueves] se acordó restar 130 porque se alarga a 20 años la devolución”, señaló.
El consejero tuvo que matizar ese alivio al ser preguntado por una periodista sobre la reducción en las entregas a cuenta y la liquidación del modelo de sistema financiero para 2015. Moragues asintió y admitió la “sorpresa desagradable” de que se han de pagar 177 millones de euros más por la “estricta” aplicación del sistema financiero autonómico de 2009. Esto demuestra una vez más cómo el modelo es “injusto y discrimina”, y por qué el PSOE debería “pedir perdón”, agregó. Este nuevo pago se compensará en parte con el alargamiento en el plazo de las liquidaciones anteriores referidas.
Moragues resaltó el beneficio que supondrían diversas medidas para ahorrar, para rebajar la carga financiera de la Generalitat, pero no aludió a ningún nuevo ingreso concreto del Gobierno ni a los fondos de compensación que reclama el Consell. Asumió que “no existe clima político” para abordar la reforma del sistema financiero “en lo que queda de legislatura”, como reiteró ayer mismo el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Coherencia
El consejero defendió su abstención en la votación sobre el déficit simétrico para todas las autonomías del 1% hasta 2017 en el Consejo de Política Fiscal por “coherencia”. El pasado año, la Generalitat ya abogó por “el déficit asimétrico”. Moragues, por otra parte, presentó el anteproyecto de ley de Hacienda Pública de Subvenciones y del Sector Público, para ganar en eficacia y “optimizar cada euro”.
La portavoz del Consell, María José Català, anunció el nombramiento de Mariona Roger como directora general del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), cargo que quedó vacante tras la salida de Enrique Montes. Roger era socia de Price Waterhouse Coopers y ha trabajado en el IE Business School, Grupo Multitel, ONO y Ezentis. También reiteró que el Consell “respalda” la postura de la presidencia del PP de Castellón contraria a la recogida de firmas para pedir el indulto del expresidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, condenado a cuatro años.
"Cada día que pasa la situación es más grave"
El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, “sólo ha ganado tiempo aceptando que el Gobierno aplace las grandes decisiones en materia de financiación”, aseguró ayer el diputado socialista en las Cortes Valencianas Julián López Milla. “En octubre se tiene que aprobar el plan económico financiero y el Consell no ha conseguido apenas nada para cuadrarlo, sino más bien lo contrario”. añadió el portavoz de Economía del PSPV-PSOE, que emplazó al jefe del Consell a que “exija que las decisiones importantes se tomen ya, que no queden para mañana porque cada día que pasa la situación es más grave”.
La abstención del consejero de Hacienda, Juan Carlos Moragues, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera “es una postura inútil que a los valencianos no nos va a servir para nada más”, señaló el diputado socialista. En su opinión, lo único que se ha abierto ahora es un “compás de espera hasta el mes de octubre para que el Consell decida qué medidas va a proponer para recortar el déficit”. López añadió que “ni se ha logrado un compromiso sobre la reforma de la financiación, sino que únicamente se ha confirmado que el sistema actual se prorroga hasta la próxima legislatura, ni se ha conseguido una compensación para la Comunidad Valenciana mientras el sistema se reforma”.
“Moragues no ha conseguido ni abrir el debate para una financiación más justa, ni un compromiso de pago de la deuda histórica, ni siquiera un fondo provisional”, aseguró el diputado de la Coalició Compromís Fran Ferri, que reclamó a Fabra un requerimiento formal para que se garantice una financiación justa y, en caso contrario, “que demande judicialmente a Rajoy por tratar a los valencianos como ciudadanos de segunda”.
“Si algo puede hacer en estos momentos el presidente Fabra es que en el ahorro en el pago de los intereses del Fondo de Liquidez Autonómico se destine a los colectivos más necesitados, a paliar el hambre y la pobreza”, sostuvo la portavoz de Esquerra Unida, Marga Sanz, que dijo que Fabra “no puede sacar pecho por la abstención en torno al 1% del déficit”.
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