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La oposición reclama a Feijóo que se paralice la venta de Novagalicia Banco

El PP insiste en que prefiere la opción de que lo compre un fondo extranjero

El mismo día que se ponían en marcha los trámites oficiales para la subasta de Novagalicia Banco (NCG), la oposición parlamentaria se lanzó este lunes en tromba a pedir al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que interceda ante el Gobierno para que paralice el proceso. El BNG interpeló además a Feijóo para que aclare “si se ha entrevistado en secreto” con los máximos directivos de los tres grandes bancos españoles, Santander, BBVA y Caixabank, interesados en hacerse con la entidad gallega. Desde ayer, los potenciales compradores ya pueden acceder a toda la documentación del banco para preparar sus propuestas. El cálculo es que la privatización esté culminada en un plazo de unos dos meses.

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 La postura más o menos oficial de la Xunta y del PP gallego sitúa su preferencia para la venta de NCG en un fondo de inversión extranjero, la opción que también busca la actual cúpula directiva del banco encabezada por José María Castellano. Su argumento es que si cayese en manos de una entidad española, la antigua caja gallega sería de hecho absorbida, mientras que los inversores extranjeros mantendrían la marca y una entidad propia dirigida desde Galicia.

Feijóo, sin embargo, sembró incertidumbres con una entrevista el pasado domingo en La Voz de Galicia en la que no se decantaba por ninguna de las dos opciones y se limitaba a manifestar su deseo de que NCG mantenga el crédito a empresas gallegas así como su obra social. El portavoz del PP en el Parlamento autónomo, Pedro Puy, defendió este lunes que se haya anticipado la venta de la entidad —Bruselas había dado de plazo hasta 2017— porque “aclarará incertidumbres” e impedirá que “con el paso del tiempo pueda producirse una depreciación de la entidad”. Puy insistió en que el partido que apoya a la Xunta prefiere un fondo extranjero como mejor garantía para que NCG continúe como “entidad independiente”.

Pero la oposición se niega a escoger entre dos opciones que ya hace unos días el nacionalista Francisco Jorquera calificaba como “Guatemala o Guatepeor”. El portavoz del PSdeG, Abel Losada, pidió que la venta se paralice hasta 2017 agotando el plazo que ha impuesto Bruselas. A los socialistas tampoco les agrada que la entidad gallega caiga en manos de un “fondo especulativo” como el que adquirido ya por 60 millones de euros EVO Bank, la marca de NCG fuera de Galicia. Y acusan a Feijóo de “rendirse ante los intereses de Madrid”. El BNG insiste en que “se va a vender a precio de saldo una entidad en la que se han inyectado 9.000 millones de dinero público”. Yolanda Díaz, de AGE, insinuó que la venta ya puede estar pactada y que será “la culminación de una gran estafa, porque se socializan las pérdidas y otros se llevan los beneficios”.

Por otra parte, ha quedado suspendido el juicio, previsto para el próximo jueves, en el que el fiscal general de Galicia, Carlos Varela, pretendía activar una demanda colectiva contra NCG por la venta de preferentes. La vista se ha paralizado después de que la entidad aceptase, como pretendía el fiscal, en cesar en la venta de esos productos. En cualquier caso, NCG no había vuelto a comercializar preferentes desde 2009.

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